de

del

Jaquelyn Rosado Puerto
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán
La Jornada Maya

Lunes 3 de abril, 2017

El Presidente de la República presentó el lunes 13 de marzo el “Nuevo Modelo Educativo”. En éste se plantea, entre otras cosas, una educación que favorezca la equidad de género. Sin embargo, no resulta claro cómo se logrará este objetivo, porque para ello hace falta un cambio de raíz, una modificación profunda de los paradigmas educativos, de la cultura en general, y la cultura mexicana es tradicionalista en esencia.

Hay un choque entre lo que se plantea y la realidad social, una incongruencia entre lo que se va a enseñar con lo que se va a afrontar fuera de la escuela. Curiosamente, un día antes de la aparición del Presidente en cadena nacional informándonos de sus planes, en una reunión política dirigida a jóvenes deportistas de Yucatán, conocido diputado del mismo partido que el mandatario hablaba sobre estadísticas alarmantes de adicciones y embarazos no planeados entre adolescentes. Decía que la edad para iniciarse en una adicción es cada vez menor, y que los números de embarazos por descuido aumentan cada año. ¿Las grandes perdedoras? Las mujeres, por supuesto. Se le preguntó al respecto si considera esta situación como motivo por el que se debe educar con equidad de género; y entre sus pobres respuestas fue que “no es necesario, tenemos ya igual cantidad de mujeres en las Cámaras y mira, no ha cambiado nada. Sólo es un problema de operatividad” para luego rematar diciendo “para mí con que se eduque al hombre es suficiente” y se perdió entre la multitud de señoras que querían tomarse la foto con él.

Desafortunado comentario de uno de tantos legisladores que no tienen idea de lo que significa equidad de género, que no tiene idea de cómo se puede alcanzar un objetivo de inclusión y no discriminación, porque él mismo o ella misma, en caso de las legisladoras, han sido formados culturalmente con actitudes discriminatorias que asignan un rol a cada sexo, y que si se sale de ese rol se provoca rechazo social. No fue suficiente que nos dieran más espacios para legislar. Las mujeres de las Cámaras no están legislando a nuestro favor (y por ende a su favor), y si lo hacen hay muy poco eco en sus voces, pues las políticas públicas que benefician a las mujeres no se están ejerciendo debidamente. Violencia institucional, inequidad de oportunidades escolares y laborales, estigmas sociales, publicidad no regulada que favorece la reducción de la mujer a mero objeto. Para comenzar, hay que identificar qué factores impiden que la educación con equidad plena y total se consolide, qué instituciones interfieren imponiendo dogmas, prejuicios o discursos contrarios a la misma. Una vez identificados, trabajar sobre estos factores, regular a estas instituciones.

Desde edades tempranas se debe educar con equidad. En casa, en la comunidad, para luego fortalecerse y tomar rumbo en la escuela con el objetivo de que ambos géneros puedan tomar decisiones de igual importancia en todos los ámbitos. El profesor o profesora que no rompa con un modelo de pensamiento tradicional, que no se reeduque y convenza de los beneficios de educar con equidad, no podrá transmitir efectivamente el mensaje, aunque tenga en sus manos un programa educativo progresista que explique cómo hacerlo. La formación docente continua debe ser planeada, sistematizada, motivada positivamente, dotada con herramientas que les permitan aprender y transmitir el conocimiento al respecto. ¿Evaluar? Sí, pero a las autoridades encargadas de esta tarea, para saber si sus programas están cumpliendo el objetivo; porque evaluar punitivamente al docente crea una resistencia o genera un estrés que impide que se interioricen los aprendizajes.

En Yucatán cada vez más mujeres son adictas al alcohol. Destacamos en las cifras nacionales, pero eso no nos enorgullece. Las mujeres queremos destacar en deporte, en matemáticas, en ciencia. Queremos tener otras opciones para nuestro futuro: frente a un aula, en un laboratorio, viajando por el mundo, innovando, liderando, formando hijos con un enfoque equitativo, contribuyendo al desarrollo socioeconómico del país. Queremos ser incluidas. Que nuestras relaciones personales no sean definitorias de lo que será nuestra vida, sino una parte más de la misma, sin condicionamientos sociales ni culturales. Educar con equidad es necesario, urgente, para derribar patrones socioculturales que lesionan nuestros derechos y oportunidades.

[i]Mérida, Yucatán[/i]

[b][email protected][/b]


Lo más reciente

Con 258 votos a favor, diputados aprueban reforma a Ley de Amnistía

El pleno inició la discusión de 71 reservas, aunque 22 serán enviadas al Diario de los Debates

La Jornada

Con 258 votos a favor, diputados aprueban reforma a Ley de Amnistía

Acusan en Texas a más de 140 migrantes por intento de ingreso masivo a EU

No se reportaron heridos durante la supuesta entrada del 12 de abril en El Paso

Ap

Acusan en Texas a más de 140 migrantes por intento de ingreso masivo a EU

Vila a la campaña, primera llamada

Editorial

La Jornada Maya

Vila a la campaña, primera llamada

Los ''jueces del mundo'', sin calidad moral

La Resaca 2.0

Normando Medina Castro

Los ''jueces del mundo'', sin calidad moral