El PRI no se enfrentará a sí mismo

Carlos Sobrino Argáez
Foto: Óscar Rodríguez
La Jornada Maya

Lunes 13 de noviembre, 2017

Los verdaderos partidos políticos como el nuestro, existen para construir decisiones y alcanzar resultados, como tener, el que sin duda alguna es el mejor gobierno estatal de México y de Latinoamérica, reconocido por organismos internacionales, y que tiene el sello del PRI de Yucatán.

Y claro, los buenos resultados se consiguen con base en decisiones maduras, serenas y serias; como la que juntos tomamos, al definir el método por el que elegiremos a nuestro candidato a la gubernatura, diputados locales y abanderados a las alcaldías de este gran estado, este Yucatán que reclama seguir avanzando por un camino de logros probados.

El PRI de Yucatán sabe decidir. Hemos aprendido que, así como los buenos resultados nacen de las buenas decisiones, éstas surgen del diálogo franco. Hemos hecho del compromiso del diálogo una de las columnas de la nueva ideología del PRI yucateco.

El diálogo trae inclusión, respeto y oportunidad de que todos se sientan tomados en cuenta. Por eso, con diálogo y reflexión escogeremos a nuestros candidatos. El diálogo asegura que seamos escuchados como parte de un proyecto en el que hay y habrá espacios, oportunidades y responsabilidades para todos.

He tenido el honor de encabezar este PRI de diálogo e inclusión, que llega a cada espacio de nuestro territorio y estructura, porque con diálogo, territorio y estructura, el PRI va a obtener victorias que sí importan y que Yucatán necesita.

Por eso, desde ahora hay que entender que ningún aspirante le ganará al otro, que nadie se alzará con la victoria interna, que nadie, absolutamente nadie, será derrotado en el espacio de aspirar a una candidatura, eso no pasará porque los priístas no somos rivales de otro priísta. Nuestro partido no se enfrentará a sí mismo, porque no somos ni infantiles, ni mezquinos.

Lo que habrá serán candidatos que reciban el peso, responsabilidad y honor de serlo.

No habrá victorias en el proceso interno, sino asignación madura y seria de responsabilidades. Precisamente por eso, la primera responsabilidad de cada mujer y hombre priísta que reciba el peso de una candidatura, será sumar a quienes hicieron posible para que ellos la obtengan, buscar el respaldo de quienes pueden ayudarlos a cumplirla.

Como presidente del PRI en Yucatán, me importa mucho dejar claro que los priístas no nos dedicamos a vencer o derrotar priístas; sabemos hacer equipo y sabemos que las únicas victorias que valen son las que aseguran el rumbo del estado y hacen que todos avancemos.

Así ocurre en los grandes equipos ganadores, en los que cada quien sabe jugar su posición y entender sus deberes y espacios, y juegan con alegría, emoción y compromiso. En el futbol, ningún delantero quiere vencer a su propia defensa o portero; en el béisbol ningún jardinero quiere vencer a su pitcher. Cuando llega el momento, todos dan lo mejor de sí y todos celebran unidos las victorias de su equipo.

Así, en el PRI ningún candidato aspirará a vencer a sus militantes, y ningún militante puede, en buena lid, desear vencer a su abanderado. En el PRI somos mucho, pero mucho más grandes que eso.

Aquí, la victoria será una responsabilidad y posibilidad para todos. Nos sobran buenos cuadros para escoger y ganar. Somos de esa política incluyente y generosa que le cumplirá a las mujeres y los jóvenes.

Es mucho lo que está en juego y no es tiempo de pensar en uno, sino en todos. No es tiempo de pensar con egoísmo, sino con espíritu de equipo. No es tiempo de pensar en nombres personales, sino en el destino de toda una generación y de más de 2 millones de habitantes de Yucatán.

*El presente texto es un extracto del discurso expuesto por el presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional durante la Asamblea Extraordinaria del tricolor.

[b][email protected][/b]