Una Corea del Norte nuclear

Eduardo del Buey
Foto: Ap
La Jornada Maya

Siempre he creído que la diplomacia funciona mejor cuando ambos lados trabajan con una firme comprensión de la realidad. Sobre la situación de Corea del Norte y su capacidad nuclear, no creo que sea el caso.

Según un reporte de AP del 13 de diciembre, Jeffry Feltman, un diplomático norteamericano veterano, quien también es el Secretario General Adjunto para Asuntos Políticos de la ONU, afirmó haber dicho a los norcoreanos que “necesitan demostrar que quieren cambiar su rumbo, que buscan algún tipo de acercamiento, para empezar de nuevo las negociaciones”.

Dijo que recalcó “la necesidad urgente de prevenir cálculos erróneos y reducir el riesgo de conflicto,” resaltando también el compromiso de la comunidad internacional en alcanzar una solución pacífica al conflicto, y su oposición al desarrollo de armas nucleares por parte de la nación asiática.

Sin embargo, todo parece indicar que Corea del Norte ya es una potencia nuclear.

La comunidad internacional haría bien en lidiar de una vez con esta realidad, en vez de seguir creyendo que pueden detener la marcha del país hacia la consecución de una bomba nuclear.

Hemos vivido en las últimas décadas, permanentemente, con 5 miembros del Consejo de Seguridad de la ONU que también son estados nucleares, sin mencionar a Pakistán, India e Israel. La situación de seguridad en Pakistán se mantiene en estado crítico, con la presencia constante de elementos activos de ISIS y Al Qaeda en el país. Sin embargo, la comunidad internacional presta poca atención a esta situación, o al peligro que presenta la posibilidad de que el arsenal nuclear pakistaní caiga en manos terroristas.

Hay que recordar que el fundador de Al Qaeda, Osama Bin Laden, fue asesinado justo en frente de una importante central militar pakistaní- lo que pone en duda el rol del país en el combate al terrorismo.

La amenaza que presenta la posibilidad de que las armas pakistaníes caigan en manos de cualquiera de los grupos terroristas que parecen operar no solo con impunidad en el país, sino con el conocimiento de los oficiales de inteligencia, no ha provocado una respuesta global como lo ha hecho Corea del Norte.

[b]¿Por qué?[/b]

Porque a diferencia de Pakistán, India e Israel, parece ser que ahora, a parte de la retórica, Corea del Norte tiene la capacidad para desarrollar mecanismos que le permitan llevar a cabo un ataque nuclear cerca y lejos, incluyendo en los Estados Unidos.

El régimen de Pyongyang ha amenazado a los Estados Unidos, en repetidas ocasiones, con un ataque termonuclear, usando misiles balísticos intercontinentales que ha estado probando abierta, constante y exitosamente en los últimos años.

Es cierto que los norcoreanos aún no tienen sistemas de envío exactos, pero la exactitud es realmente innecesaria en esta era digital moderna.

Un estallido termonuclear en la estratósfera, con capacidad de pulso electromagnético, bien podría derribar la infraestructura digital estadunidense. El país no sólo tiene la capacidad de para defenderse, también, su estructura financiera, que podría ser impactada por la economía global, no sería fuertemente afectada debido a su situación actual. De hecho, más allá de China, el régimen de Pyongyang no tiene otro socio comercial importante, debido a años de sanciones económicas en su contra.

De ahí la creciente preocupación, debido al aumento retórico de ambas partes, y el claro y presente peligro de un mal cálculo, de cualquiera de los dos lados, que podría tener repercusiones catastróficas.

Ha habido tensión en la península de Corea desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. Un armisticio ha mantenido la tensa tranquilidad entre el norte y el sur desde 1953, y el norte iguala los ataques verbales de EU y el sur, con ataques limitados a sus navíos e islas, así como con ataques terroristas a los líderes políticos del sur.

Un ataque nuclear del norte al sur podría resultar en millones de muertes, debido a que Seúl, la capital, con una población de alrededor de 12 millones, está a sólo 50 kilómetros de la frontera. La medida llevaría con seguridad a una respuesta masiva de los Estados Unidos, con consecuencias catastróficas tanto para el Norte como para el sur.

[b]Entonces ¿qué se puede hacer?[/b]

Creo que debemos, como se mencionó anteriormente, aceptar el hecho de que Corea del Norte es un estado nuclear y que tiene los mecanismos necesarios para llevar a cabo un ataque nuclear exitoso en blancos extranjeros, cercanos y lejanos. También debemos aceptar el hecho de que su líder, Kim Jong Un no es un suicida, pero busca perpetuar su dominio y mantener la existencia del país asiático en su forma actual.

Con esto, podemos asumir que lo que busca el norte es un lugar en la mesa de las potencias nucleares. Busca ser tomado en serio como un jugador a largo plazo, que planea sobrevivir, al hacer de cualquier ataque en su contra, uno suicida.

Quizá, al aceptar esta realidad, y al negociar sin precondiciones, de ambas partes, Corea del Norte y el resto del mundo pueden llegar a algún tipo de pacto - como hicieron occidente y la URSS hace sesenta años. El régimen de Pyongyang y la comunidad internacional no tendrían nada que perder, y sí mucho que ganar al aceptar la realidad y entablar negociaciones.

Es demasiado tarde para buscar evitar la proliferación nuclear en Corea del Norte. Es más que probable que ya tengan una bomba nuclear, y tienen los misiles para atacar, según lo demostrado por las pruebas recientes. Lo que se necesita es traer al país asiático a la mesa de negociación, para que empiece a actuar como un poder nuclear responsable. Así como ninguna otra potencia nuclear ha utilizado sus armas desde 1945, debido al miedo de destrucción mutua asegurada, hay que hacer sentir a Corea del Norte segura, para lograr que mantenga su arsenal guardado.

Algunas veces el refrán de Teddy Roosevelt de hablar calmadamente y cargar una gran vara puede funcionar.

En este caso, muchos participantes tienen grandes varas.

Pero ¿pueden hablar con calma, para reducir las tensiones y crear las medidas para generar confianza que los tiempos actuales requieren?

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