Texto y foto: Óscar Rodríguez
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Viernes 20 de julio, 2018

Hija del movimiento estudiantil de 1968 y protagonista activa en grupos de izquierda desde hace medio siglo, Martha Beatriz Asid Gaytán siempre ha estado del lado de los vencidos, pues desde aquella tarde triste en Tlatelolco donde vio caer uno a uno a sus compañeros de lucha, le tocó vivir en carne propia los fraudes electorales de 1988 y 2016, para que a 50 años de su despertar político, la vida la pusiera como la primera senadora de izquierda que representará a Yucatán en la Cámara Alta del Congreso de la Unión.

En charla con [i]La Jornada May[/i]a, la activista social y próxima legisladora federal, aseguró que su compromiso desde el Senado será garantizar la justicia social, defender la libertad de expresión y pugnar por las principales necesidades que tiene Yucatán, tierra que ha sido su hogar desde 1986, pues es oriunda de la capital del país donde pasó del rock and roll a los balazos.

Luego de batallas perdidas contra el priísmo y el neoliberalismo represado por Acción Nacional, los cuales, aseguró, le robaron el triunfo a los adalides de la izquierda mexicana, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y Andrés Manuel López Obrador, Asid Gaytán será la primera senadora por Yucatán que milita en una fuerza izquierdista, como lo es Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

La senadora electa aseguró que Yucatán es la tierra que le abrió los brazos, por ello, desde el Congreso de la Unión luchará principalmente por la niñez del estado, toda vez que ellos son la semilla del país que deberá sanar y reconciliarse luego de años de ser destruido por una oligarquía rapaz que fue repudiada en las urnas el pasado uno de julio.

[b]Óscar Rodríguez[/b]: ¿Cómo es que usted se interesa en la lucha social?

[b]Martha Beatriz Asid Gaytán[/b]: Mi despertar político fue en 1968, con el movimiento de los estudiantes; pasé del rock and roll a los balazos. Estuve el 2 de octubre, me tocó estar ahí. Fue un despertar muy crudo y a partir de entonces fui antisistema, no pude tenerle confianza al sistema político de nuestro país, no pude volver a tener tranquilidad, todo fue un parteaguas para mí, creo que para el país también. Pasé de una manera muy dramática de la adolescencia a la madurez, a partir de entonces estoy en la izquierda, soy antisistema, siempre observando la situación política del país, la miseria, la injusticia, defendiendo a los indefensos, tratado de ayudar a las personas que menos saben y menos tienen, porque además entendí una cosa muy pronto, que los instrumentos principales del sistema han sido siempre la ignorancia y la miseria, con eso han manipulado al pueblo eternamente.

Cuando terminó todo lo del 68 me vine para acá, a Mérida, con el encargo de Heberto Castillo de ir sembrando semillas por estos lares para ver qué podemos hacer. Entonces me di cuenta de que hasta las piedras eran priístas, era imposible hacer nada porque toda la gente pensaba, hablaba y veía PRI. El ingeniero Heberto Castillo me dijo que me quedara tranquila, que no había manera, que no había condiciones de hacer nada por acá, y me quedé relativamente tranquila.

Empezó mi actividad de lleno en 1987, cuando inició el movimiento de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, y definitivamente me uní a él. Estuve con él en Quinta Roo y fui su encargada de prensa. Nos llevamos una lucha tremenda porque en todos lados le cerraban las puertas al ingeniero; anduvimos en toda esa lucha junto con él. Entonces vino el fraude del 88; fue un golpazo, un mazazo en el cerebro que nos dejó a todos aniquilados, porque ganamos y le robaron la elección. Nos quedamos totalmente aturdidos porque el ingeniero Cuauhtémoc nos calmó a todos y nos dijo “tranquilos, esto ya se acabó. Quédense tranquilos, porque los van a matar y no podemos hacer nada por ustedes”, y así fue, nos quedamos tranquilos.

Siguió el movimiento hasta convertirse en el Partido de la Revolución Democrática (PRD), de la que soy fundadora en Quintana Roo. Ahí tuve la cartera de prensa y comunicación, tuve la cartera de honestidad y justicia, fui candidata dos veces para diputada local. Como era de esperarse, no ganamos, no nos iban a dejar ganar jamás y seguí hasta que renuncié al PRD.

Cuando nació Convergencia me invitaron a participar, pero con la condición de que denostara al PRD ante la prensa. Díaz Polanco, que era el presidente estatal de Convergencia, me garantizó una regiduría si lo hacía, pero le dije que no.

Luego me quedé tranquila hasta que apareció López Obrador. Empecé otra vez como activista a moverme, y en Quinta Roo voté en el 2006. Después del fraude de ese año me vine aquí definitivamente, acá en Mérida estaba mi esposo, yo estaba en Quintana Roo porque me lo exigía el trabajo, pero vivía allá y estaba acá, era viajar cada 15 días.

Estoy en la izquierda y activa en la política y en los aconteceres de México del lado contrario del gobierno totalmente, desde hace muchos años.

[b]OR[/b]: ¿Entonces usted sí es de la izquierda de a de veras?
[b]MBAG[/b]: Totalmente, creo que soy de izquierda desde que nací, siempre tuve esa cosa de la compasión, de la comprensión y del sentido social.

[b]OR[/b]: Casi 50 años después le toca ver ganar a la izquierda, después de las zapatizas que siempre les ponían ¿qué siente ahora?
[b]MBAG[/b]: Lo que acaba de suceder el 1 de julio es algo maravilloso para mí, que quizá todavía no lo alcanzo a dimensionar de tan maravilloso que es, porque la lucha ha sido tan larga y tan dura. Siempre tuve fe en el pueblo de México; mucha gente me decía, no Martha, andas mal, la gente no está politizada, la gente no está preparada, no va a suceder, es tu ideal pero no va a suceder; yo les decía que tenía fe en el pueblo de México, que el pueblo respondería en un momento dado, porque la realidad lo haría responder.

Vivir estos históricos momentos es para mí un privilegio enorme, una alegría muy grande, y elevada exponencialmente ya que pude llegar a un lugar donde se van a tomar decisiones trascendentales para el país, eso es todavía más increíble, nunca me lo imaginé, nunca lo pensé. Esto se decidió sin mi presencia, porque estoy en este lugar por insaculación, porque se fue recorriendo la lista de los plurinominales y llegué.

[b]OR[/b]: Ya es casi senadora ¿qué siente después de ver hace 50 años a muchachos masacrados por el Estado; de ver cómo se aplastó al movimiento del 88; de ver nacer y casi morir a un partido de izquierda como el PRD; y ahora, en el Senado? ¿Qué responsabilidad tiene luego de haber sido hija de los movimientos de izquierda desde 1968?
[b]MBAG[/b]: Siento que esta lucha viene desde el 68; somos los chavos del 68 que nunca olvidamos y nunca perdonamos, que nos propusimos seguir luchando y lograr no sólo lo que teníamos en el pliego petitorio en aquel entonces, sino mucho más, porque las cosas fueron empeorando. Sí, efectivamente esto que ha pasando ahora es hijo de los sesetaiocheros, porque hay mucho del 68, mucha gente del 68 en este movimiento desde que inició el movimiento de López Obrador; personas que vinimos con la herida abierta y con la indignación de que está impune, que haya quedado así nada más. Mi esposo estuvo en el 68, compartimos aquellos días tan tremendos y que cada 2 de octubre nos encargamos de rescatar la indignación, la impotencia y el gran dolor de ver a tanto compañero muerto y desaparecido.

[b]OR[/b]: ¿Ahora pasa de la protesta antisistema a ser parte de lo que luchaste, cómo hará la diferencia?
[b]MBAG[/b]: Estamos dispuestos a escuchar a la gente. Si te das cuenta, la gente siempre ha sido un actor invisible en la vida del país, creo que ahora es tiempo de que sea la gente que se exprese, claro, nosotros podemos meter iniciativas, dar ideas y todo lo que tu quieras, pero lo que buscamos en pocas palabras es la justicia social, la igualdad, que se acabe el yo soy más que tú, el rico y el pobre; que se acabe esa desigualdad y que todos tengan las mismas oportunidades; que exista la libertad de expresión, no sólo a nivel medios de comunicación, sino a nivel de a pie, que todo mundo pueda expresarse abiertamente y que nunca más vuelva existir esas injusticias como la de Tlatelolco, como la de Tlatlaya, como las de los 43 de Ayotzinapa, como Aguas Blancas, Acteal. Que no vuelva a existir jamás.

Una de las cosas que hemos platicado quienes vamos a estar en condiciones de construir es sobre la niñez, que es el material con el que se va a construir el México de mañana. Tenemos que tener muy claro qué clase de país queremos, y va a depender de los individuos que formemos, entonces, si me preguntas qué me interesa, te diría que todo, porque es una cosa integral, es un efecto dominó: si descompones algo, se va descomponer otra cosa, y otra, que es lo ha pasado ahora que la gente ha perdido valores, que la gente desconfía de todo mundo, que la gente le tiene miedo a todo el mundo, que hay otras quienes se descuidan para aprovecharlo. Creo que si la gente vive tranquila, satisfecha de su vida, de su país, de su vecino, de su familiar, no está buscando hacer mal, entonces debemos verl esto como una lección y trata de ser mejores seres humanos en todos los sentidos, que nos interese todo. Se trata de ser una comunidad, interesados de todo en todos.

[b]OR[/b]: ¿Qué responde a quienes catalogan como un error el haber dado el control total a Morena tanto en el Congreso como en el Poder Ejecutivo?
[b]MBAG[/b]: Definitivamente no, porque las personas que vamos a llegar hemos luchado por cosas específicas, no por el poder; por otro lado, López Obrador no es un absolutista. Debemos tomar en cuenta que el país está destruido en todos los sentidos, desafortunadamente hay mucha gente que no se da cuenta de ello, no se da cuenta de la gravedad en la que vive el país, entonces la forma de pensar de López Obrador y la forma de planear su gobierno es siempre pensando en que todo esto cambie para bien. Lo conocemos desde hace muchos años; nos golpearon en el 2006, nos levantamos y seguimos luchando; nos golpearon y seguimos luchando con él, por qué crees que lo hacemos. Somos personas pensantes, somos personas que tenemos capacidad de análisis y que le hemos marcado sus errores,pero observamos en el actuar y pensar de López Obrador un camino correcto para enderezar, rescatar y sanar al país.

[b]OR[/b]: ¿Cómo le gustaría que fuera recordado su paso por el Senado?
[b]MBAG[/b]: Como una muy buena senadora, muy congruente, muy justa, muy clara, muy directa, muy franca. Al lo mejor muy dura, pero quiero pasar a la historia como una senadora que habló siempre con la verdad y que luchó por hacer las cosas, en el estado y en el país. No voy a traicionar mis convicciones por nada ni por nadie.

[b]OR[/b]: Finalmente. ¿Cuál es su compromiso con Yucatán?
[b]MBAG[/b]: Muy grande, le debo mucho a Yucatán. Lo adopté como mi terruño porque me enamoré de Yucatán, de su gente tan linda y sencilla; de la naturaleza, la tradición, la cultura. Mis compañeros de partido, mis amigos y mis familiares saben que voy a escuchar siempre y no voy a perder el contacto jamás; defenderé muchas riquezas de Yucatán que están en peligro, sanear muchas que están enfermas, escuchar siempre y estar siempre por Yucatán, no por las transnacionales. Estoy para y con los yucatecos.


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