de

del

Óscar Muñoz
Foto: Facebook @GranMMM
La Jornada Maya

Martes 9 de octubre, 2018

En los primero días del nuevo gobierno estatal, algo se ha dicho respecto de los museos yucatecos. Al parecer, desde el balcón de la Secretaría de la Cultura y las Artes (Sedeculta) han surgido atisbos de lo que sucedería con los museos de la entidad. Todo parece indicar que, después de algunos meses de estudiar el caso insólito del Instituto de Historia y Museos de Yucatán (IHMY), la Sedeculta decidirá el destino de esta institución. Ya se verá después lo que pasará con el Gran Museo del Mundo Maya (GMMM). Es de todos sabido que estas dos instituciones fueron establecidas a iniciativa del anterior director del IHMY y aprobadas desde el gobierno de la antecesora de Rolando Zapata.

Es posible que el IHMY desaparezca como tal y quede sólo el GMMM; sin embargo, aún no es seguro que suceda esto, ya que las nuevas autoridades de la Sedeculta esperarán los resultados del estudio ofrecido. Si el GMMM también desaparece como institución museográfica es lógico suponer que las piezas que el anterior director del IHMY extrajo del Museo de Antropología Palacio Cantón sean regresadas al recinto original. En caso de que el GMMM no llegara a desaparecer, habrá que suponer que las piezas extraídas de Palacio Cantón seguirán en las salas del museo impuesto por Esma Bazán, el anterior director del IHMY.

Si los resultados del estudio que el nuevo gobierno estatal iniciará en breve indican que lo más conveniente fuera mantener el GMMM como hasta la fecha, no habrá que olvidar que en este museo y en la mayoría de los otros no existen programas educativos consistentes. Las tendencias educativas en los museos corresponden a las formas de entender un museo. Desde hace varias décadas los museos han dejado de ser meros escaparates para transformarse en espacios educativos que cuentan con muestras de la historia, el arte y la ciencia; sin embargo, esta situación y el enfoque educativo han sido desconocidos en la mayoría de los museos de la entidad.

Más allá del enfoque comunicativo implementado en casi todos los museos del mundo hace ya varios años, ha sido necesario desde entonces que la educación sea puesta por encima de la comunicación museográfica. Desde los años noventa, investigadores de la educación en museos señalaban que muchos profesionales consideraban que los museos debían tener una relación más estrecha con la comunidad y ser más útiles para el público. La realidad es que la transformación de los museos hacia las políticas de acceso y de integración de las audiencias en estos espacios culturales no ha sido por la reflexión interna de los museos y del convencimiento de la función social de estos recintos, sino del impulso de los gobiernos y de los patrocinadores para otorgar una relevancia social a los espacios museísticos.

La tendencia señalada arriba surgió cuando los museos tomaron más importancia como lugares de ocio y entretenimiento en la actual sociedad de consumo. A partir de esta noción comercialista del museo, los visitantes son transformados en clientes o consumidores y se les ha clasificado como audiencia bajo el enfoque del individualismo neoliberal y de la sociedad del conocimiento. Ante ello, los programas educativos resultan un recurso para atraer consumidores, ya sea de las piezas en venta o del conocimiento implicado en ellas. Con este tipo de objetivos, ha sido posible atraer más patrocinadores para estos espacios culturales, junto con sus programas.

En la situación descrita, la misión educativa verdadera de los museos no es abordada con la seriedad y la responsabilidad necesarias ni son utilizados los recursos económicos y humanos que merecen, ya que el propósito principal de las acciones educativas sólo es entretener a los consumidores de ocio: niños, familias y turistas. Y esto es lo que ocurría en el GMMM, y en otros museos de Yucatán.

Así que mucho habrá que hacer respecto de los programas educativos apropiados para la formación cultural de públicos y sustituir aquellos que han mantenido el enfoque comercialista y consumista en los museos, amén de aquellas actividades surgidas de la ocurrencia instantánea. Será fundamental contar con programas que, no sólo contribuyan en la formación integral del individuo, sino que transformen a los que ya se mueven en las dimensiones del consumismo y el neoliberalismo y los integren en una sociedad liberadora y transformacional.

[b][email protected][/b]


Lo más reciente

Reduce TEPJF de 4 a 2 años sanción contra Layda Sansores por Violencia Política de Género

Debe permanecer en el registro nacional en esa materia por comentarios relacionados con militantes del PRI

La Jornada

Reduce TEPJF de 4 a 2 años sanción contra Layda Sansores por Violencia Política de Género

Sacmex denuncia sabotaje en pozo de la alcaldía Álvaro Obregón en CDMX

Reportó el hallazgo de un compuesto de aceites degradado en el agua extraída

La Jornada

Sacmex denuncia sabotaje en pozo de la alcaldía Álvaro Obregón en CDMX

La Mérida que se nos fue

Noticias de otros tiempos

Felipe Escalante Tió

La Mérida que se nos fue

Seis horas encerrado vuelven loco a cualquiera

Las dos caras del diván

Alonso Marín Ramírez

Seis horas encerrado vuelven loco a cualquiera