Mujer víctima de tortura en QRoo recibirá reparación de daños

Joana Maldonado
Foto: Redes Sociales
La Jornada Maya

Chetumal, Quintana Roo
Miércoles 12 de diciembre, 2018

Reyna de Jesús Gómez Solórzano se convirtió en la primera víctima directa de violaciones a sus derechos humanos que recibirá en Quintana Roo una reparación integral del daño, consistente en medidas de restitución, rehabilitación compensación, satisfacción y no repetición, enmarcada en la Ley de Víctima del estado, luego de que en 2016 la mujer fue detenida por asesinar en defensa propia a su ex cónyuge. Reyna fue encarcelada bajo un trato cruel y degradante que incluye tortura en manos de policías judiciales.

El caso de doña Reyna, que en ese entonces tenía 45 años, llegó a manos del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujer) y la Secretaría de Gobernación quienes en abril de 2016 atendieron la queja que se hizo por parte de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo, dirigida entonces por Harley Sosa Guillén, la cual comprobó que la mujer fue víctima de tortura.

La comisionada de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas en el estado, Karla Rivero, declaró que es un hecho sin precedentes la decisión aprobada por el Órgano de gobierno de la Comisión para avalar el dictamen de reparación a doña Reyna, en virtud de la recomendación emitida en el 2016 por la Comisión estatal de los Derechos Humanos de Quintana Roo, siendo la atención a víctimas uno de los temas pendientes en el estado que mantuvo rezago en administraciones pasadas.

“A dos años se está dando una puntual respuesta a este caso; no habíamos podido reparar porque estábamos en un proceso de integración del fondo de reparación y la normatividad que le diera certeza jurídica tanto a víctimas como a las autoridades de cómo actuar ante estos casos de reparación, de una víctima que además fue víctima de violencia intrafamiliar”, expresó.

Este dictamen integra la restitución, rehabilitación, compensación, satisfacción y no repetición, con las cuales las víctimas tienen derecho al restablecimiento de sus derechos conculcados, así como a la restitución de sus bienes y propiedades si hubieran sido despojados de ellos; la rehabilitación es encaminada a que las personas y la comunidad que se vio lastimada por el hecho violatorio cuenten con una medida que satisfaga ese daño sin que se trate de una indemnización compensatoria.

Karla Rivero destacó que a Reyna Gómez se le ha brindado seguimiento permanente con relación a trámites administrativos, así como seguimiento en el otorgamiento de medidas de asistencia, particularmente en materia de salud.

“Se están cubriendo daños, se cubre el daño moral, todos aquellos gastos de atención inmediata que tuvieron que erogar ella y su familia, se les está cubriendo, y recientemente la Fiscalía General ofreció disculpa pública”, explicó.

Además, luego de un año y medio, la señora Reyna obtuvo ayuda para los trámites administrativos ante Consulados y el Instituto Nacional de Migración (INM), por lo que obtuvo la residencia permanente dentro de territorio mexicano.

El caso de doña Reyna se extendió no solo a nivel estatal, por lo que concluye un pendiente que tiene el estado en la materia, aunque aún se contabilizan 246 víctimas atendidas por la CEAVQROO, bajo esquemas de asesoría jurídica, primer contacto a víctimas.

“Viene un trabajo de consolidación, esta es la primera de 246, 146 víctimas de delito y 100 de derechos humanos, pero ya empezamos; era necesario que el Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral operara, aún es un pendiente, pero ya empezamos además con un fondo de emergencia, que es específico para atender casos de crisis”, señaló la titular de la Comisión de Atención a Víctimas.

Dicho Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral opera con recursos estatales.

Lo ocurrido

La noche del sábado 4 de julio de 2015, en la calle Salvador Alvarado de la colonia Adolfo Mateos en Chetumal, la Policía Ministerial reportó un homicidio en el que la víctima, Marco Antonio Sáenz Velázquez, falleció de un paro cardiorrespiratorio derivado de un shock hemorrágico hipovolémico, como consecuencia de una herida punzo-penetrante en el corazón.

De acuerdo con los reportes policiacos y las notas periodísticas publicadas al día siguiente, Reyna de Jesús Gómez dijo que el hombre había salido a comprar una botella de “cañita” y al volver después de una hora, estaba herido. Los vecinos del lugar dijeron que se escuchó una discusión antes entre la pareja, razón por la cual al día siguiente, Reyna de Jesús fue detenida en una calle del centro de Chetumal.

Semanas después, Reyna concedió una entrevista a un sitio de internet, en donde relató su versión de los hechos. La mujer quien tiene un hijo con discapacidad visual que dependía económicamente de ella, afirmó que Manuel Antonio era adicto a las drogas y ese era el motivo por el que discutían.

El día que ocurrió el hecho, fue la propia Reyna quien se comunicó con las corporaciones de seguridad pública y emergencias, a quienes declaró que había sido ella quien hirió a su pareja.

Ese mismo día la subieron a un “carro gris” esposada de manos y pies en donde la mantuvieron en una celda de la entonces Procuraduría de Justicia. Uno de los policías ministeriales la empezó a insultar y a interrogarla. La versión de que la detuvieron el lunes siguiente al día del homicidio, fue falsa para ocultar la tortura de la que fue víctima.

Tras la intervención de asociaciones, la mujer que había sido sentenciada a 25 años de prisión fue liberada en julio de 2016.