El progreso, mediante la luz de la lectura

Texto y foto: Joan Serra Montagut*
La Jornada Maya

Viernes 8 de septiembre, 2017

Actualmente hay en el mundo 750 millones de adultos que carecen de las aptitudes más básicas de lectura, escritura y aritmética. Unos 264 millones de niños y jóvenes no reciben educación escolar. En México, en 2015 había casi cinco millones de personas de 15 años, o más, que no sabían leer ni, escribir.

La alfabetización es la habilidad de usar el texto para comunicarse a través del espacio y del tiempo. Hoy se celebra en todo el mundo, y por iniciativa de las Naciones Unidas, el Día Internacional de la Alfabetización. La Conferencia General de la Unesco lo declaró así en su sesión celebrada el 26 de octubre de 1966 con el fin de recordar a la comunidad internacional la importancia de la alfabetización de las personas, una asignatura pendiente en muchos rincones del planeta.

La alfabetización es un componente clave para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) dentro del marco de la Agenda 2030, que debe guiar el desarrollo del mundo de ahora en adelante durante más de una década. Las metas del objetivo cuatro están dirigidas en asegurar que todos los jóvenes aprendan a leer, escribir y posean conocimientos básicos de aritmética y que los adultos que carezcan de esos conocimientos tengan la oportunidad de adquirirlos. La educación permite al ser humano, entre otras muchas ventajas, la incursión al mundo del conocimiento científico, del arte y de los lenguajes simbólicos y matemáticos. Una persona alfabetizada puede comprender el lenguaje escrito y puede relaborarlo produciendo nuevos conocimientos.

Hoy, ante el desarrollo exponencial de las TIC’s, la alfabetización se hace imprescindible. Por tal motivo este día se destina a conmemorar la alfabetización en el mundo digital. Como comenta Irina Bokova, directora general de la Unesco, en su discurso oficial de hoy “las tecnologías brindan nuevas y amplias oportunidades para mejorar nuestra vida y conectarnos a escala mundial, pero también pueden marginar a quienes carecen de las competencias esenciales (…). Las sociedades del conocimiento por medios digitales están transformando lo que significa ser alfabetizado y exigen un nuevo nivel más elevado de esas competencias. Al mismo tiempo, la tecnología puede contribuir al cambio, a mejorar el desarrollo de la alfabetización”.

En este sentido, es importante abogar por una educación integral e integradora, reformada y que realmente tenga intención y vocación de cambiar al mundo. Luis Errázurriz defendió “una pedagogía capaz de educar el ojo y sacarle punta incisiva, capaz de afinarlo para que penetre más allá de las apariencias, de diversificarlo para que enriquezca nuestras formas de ver y de sacudirlo para que vuele más alto, se asombre y disfrute de la sensibilidad cotidiana”. El ojo, esa ventana al mundo que conecta nuestra alma con todo lo que nos rodea, es la parte central del logotipo de nuestra entidad (SOM Editorial Colectiva), porque creemos en la lectura como un mecanismo revolucionario de transformación social.

*Coordinador de SOM Editorial Colectiva y del Proyecto Ja’ab

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