Gobierno Laydista se disculpa con Miguel Villarino

Tras pasar 58 días prisionero en el Centro de Reinserción Social San Francisco Kobén en el 2018, este miércoles la secretaria de Seguridad Pública, Marcela Muñoz Martínez, y Renato Sales Heredia, fiscal del estado, pidieron una disculpa pública a Miguel Villarino Arnábar, columnista champotonero que criticó al gobierno de Alejandro Alito Moreno Cárdenas y Carlos Miguel Aysa González por el despilfarro de recursos, malas estrategias económicas, políticas y sociales, así como el actuar del hoy presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

El primer punto, fueron las disculpas al columnista y a su familia, iniciando por Marcela Muñoz, quien afirmó que estos hechos deben dejar un precedente para que no ocurra nuevamente, ya que, los gobiernos deben garantizarles a los ciudadanos y periodistas, la libertad de expresión enmarcada en la Constitución Política de México, y donde las autoridades deben ser responsables de monitorear que agentes cumplan los protocolos de preservación de los derechos. 

Seguidamente, Sales Heredia, también pidió disculpas por un proceso tan “manchado” que dejó en claro lo mal que están las autoridades de procuración de justicia en el manejo de protocolos e integración de carpetas, hechos que están cambiando poco a poco como lo ha instruido Layda Sansores, gobernadora de Campeche. Sin embargo, el fiscal del estado aclaró que “ellos están cumpliendo con la recomendación de la CNDH, pero es un atentado del gobierno anterior y que no volverá a suceder. 

Durante la transmisión realizada desde su propia columna digital, Villarino Arnábar relató lo sufrido por él y su familia, así como la violación a los derechos humanos de sus hijos, destacando lo que tenían que hacer para visitarlo y ver que estuviera bien, entre sus relatos, lamentó y sentenció que su hijo más pequeño, en ese entonces de un año de edad, tenía que ser desnudado para que pasara al área de visitas. 

En ese preciso momento, la cara de Muñoz Martínez mostró preocupación de lo que en ese entonces tuvieron que pasar el columnista conocido en Facebook como Bestiometro, y su familia, y que pese a las circunstancias, sigue redactando críticas a la administración anterior, incluyendo al nuevo gobierno, y dónde también ha denunciado que hay amenazas en su contra por sus escritos. 

La disculpa además fue encaminada, a resarcir una recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), con el seguimiento de la comisión estatal, y donde resalta que dentro del penal el columnista recibió amenazas de muerte a manos de un "sicario" veracruzano, según lo expresado por el sujeto que lo obligó a desnudarse frente a él para que le tomara fotos que serían usadas para dañar su imagen en caso de no lograr asesinarlo.

Además, Villarino Arnábar y su esposa admitieron que no todo fue malo en la anterior administración, pues gracias a quien hoy es la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche (Codhecam), Ligia Rodríguez Mejía, que en ese entonces fue la primera visitadora de Derechos humanos en el penal, fue quien observó e hizo las recomendaciones necesarias para que el caso sea tratado como abuso a los derechos humanos del columnista.

También agradeció a los periodistas que siguieron su caso, que le dieron voz y que lo apoyaron en todo momento, entre ellos Raúl Sales Heredia, hermano del fiscal estatal y también director de Televisión y Radio de Campeche, canal del Estado.

Miguel Villarino Arnábar fue detenido el 7 de marzo del 2018, tras un par de días en que sus abogados observaron errores en la integración de su carpeta, y ver que fue un delito que no ameritaba prisión preventiva -desobligación de pensión-, lograron sacarlo el 9 de marzo, sin embargo lo volvieron a detener ahora por sustracción de menores.

La primera detención fue con lujo de violencia, en el estacionamiento de un supermercado en la ciudad de Champotón, donde él radica, y estaba en compañía de su esposa e hijo. La segunda detención fue frente a medios de comunicación, su familia y amigos, de una forma más civilizada, en este segundo proceso estuvo 56 días en prisión preventiva. 

Edición: Laura Espejo