De nueva cuenta, pescadores de altura bloquean Palacio Federal en Campeche

Según Ángel Castillo, líder interino de la Confederación de Cooperativas Pesqueras de Campeche, el gobierno federal representado en Campeche por Katya Meave Ferniza, les está dando largas, no establece con exactitud una fecha para que los 140 pescadores que no recibieron el apoyo de Bienpesca lo obtengan. Esto a pesar de que el recurso llegó completo y no fue dispersado, "recursos que estaban etiquetados y que sólo deben entregar a quienes faltaron".

Con mantas y lonas, los pescadores de altura arribaron al Palacio Federal, donde al no ser atendidos decidieron cerrar, de nueva cuenta, las puertas del inmueble, impidiendo el acceso y salida del edificio.

Los manifestantes aseguraron que mantendrían el plantón hasta obtener resultados o hasta que la Guardia Nacional los desalojara, pero que se mantendrían firmes hasta lograr sus propuestas a la Federación.

Al mediodía, el subsecretario del Bienestar, Manuel Zavala Salazar, y el delegado de la Comisión Nacional de Pesca (Conapesca), Ramón Ochoa Peña, arribaron al sitio ofreciendo un espacio a una comitiva, que entraría para negociar el comienzo de la dispersión de recursos y la posibilidad de un apoyo extra por el aplazamiento de la veda.

Ochoa Peña manifestó que sospechaba de los armadores y empresarios camaroneros, quienes enviaron a los pescadores de altura para reclamar dichos recursos, situación que causó el enojo de los pescadores y detonó una serie de empujones, reclamos e incluso amenazas contra el funcionario. “Como él tiene un salario quincenal, no está preocupado por el sector que realmente tiene que trabajar”, expresaron.

Luego de que Ángel Castillo calmó los ánimos, entraron a dialogar con los funcionarios, quienes no les ofrecieron una fecha para atender las necesidades manifestadas durante ya una semana, pero sí con la certeza de continuar las negociaciones hasta llegar a un arreglo benéfico para ambas partes.

Los pescadores informaron que el recurso que no entregaron a los marinos faltantes, ya no existe.

Edición: Gina Fierro