Justicia argentina exige regresar al país a la hija de Kirchner

Stella Calloni
Foto: Afp
La Jornada Maya

Buenos Aires, Argentina
Miércoles 27 de marzo, 2019

A medida que crece el escándalo por la red de extorsión y espionaje descubierta gracias a la denuncia de un empresario bonaerense, que podría hacer caer varias causas armadas ilegalmente, la justicia progubernamental aumenta la presión contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y un tribunal federal impuso una prórroga de 15 días, que se cumplen el 4 de abril, para que regrese de Cuba su hija Florencia, donde se encuentra bajo un severo tratamiento médico, a pesar del informe de los peritos de la Corte Suprema que convalidaron el diagnóstico de los profesionales cubanos y establecieron que no puede viajar en avión en estas circunstancias.

Así el gobierno del presidente, Mauricio Macri, fuertemente comprometido por la red de extorsión y espionaje ilegal que se investiga, intenta desviar a la opinión pública con la ayuda de los poderosos grupos de medios de comunicación del país, varios de ellos comprometidos también en esta red.

La hija de la ex presidenta se encuentra en Cuba en tratamiento por diversas dolencias debido a la “persecución judicial”, que le ha provocado “trastornos de estrés traumático”; la defensa de la joven había pedido 45 días de acuerdo con las necesidades del tratamiento, lo que los peritos acordaron pidiendo la historia clínica en 30 días.

Pero los jueces Daniel Obligado, José Martínez Sobrino y Adriana Palliotti solicitaron que en siete días presente la historia clínica completa y los estudios a los que Florencia Kirchner, fue sometida en Cuba.

Florencia sufre “trastorno de estrés postraumático" y "otros serios problemas físicos” que también afectaron sus piernas y los médicos cubanos advirtieron que no está en condiciones de viajar en avión.

Todo esto sucede cuando este martes el fiscal Carlos Stornelli, cada vez más comprometido con el falso abogado y agente Marcelo D`Alessio, detenido por su implicación en la mencionada red se negó a presentarse por tercera vez ante el juez Alejo Ramos Padilla, a quien acusó de “incomptenecia”.

Esto fue rechazado por Ramos Padilla que sigue adelante con la causa, a pesar de que el gobierno de Macri pide su juicio político, al no poder lograr arrebatarle la causa de extorsión y espionaje, que compromete al gobierno, lo que aumenta el escándalo.

Otro empresario Mario Cifuentes se presentó ante Ramos Padilla y denunció con pruebas que D’Alessio le pedía más de un millón de dólares como extorsión para que el fiscal Stornelli no lo pusiera en la causa ilegal de “las fotocopias” de unos cuadernos que no existen. El relato pormenorizado de Cifuentes demostró una “guerra sucia” de la que hay una cantidad de víctimas y responsables, entre ellos la diputada Elisa Carrió, que hoy se burló de la enfermedad de Florencia Kirchner y del gobierno de Cuba.

Carrió y la diputada Paula Olivetto, ambas de Coalición Cívica de la gobernante alianza Cambiemos, están involucradas por pruebas en la red de extorsión y espionaje. Carrió y la gobernadora de la provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal, esta última víctima de espionaje de su propio gobierno, pidieron la disolución de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI).

La AFI, dirigida por Gustavo Arribas, un amigo cercano de Macri, resulta cada vez más involucrada en esta causa, que además está originando, junto con la gravedad de la crisis económica, un fuerte rechazo en el principal aliado de Cambiemos, la Unión Cívica Radical. Los dirigentes, tanto de Córdoba como de Buenos Aires, se expresaron en esta horas por la posibilidad de un rompimiento de la coalición que llevó a Macri al gobierno.

“Macri no quiere introducir cambios. Parece decir que todo está bien como está. Eso equivale a afirmar que siete mil 600 millones de presupuesto para la AFI no se tocan. La impunidad de su manejo, cuya rendición de cuentas es vidriosa, tampoco. Lo que se negoció, entonces, puede pasar por sacar de la mira a la gobernadora (Vidal) con aspiraciones presidenciales pero sin tocar el organismo y su función. Lo dijo el jefe”, señala el analista Alejandro Tarruella, en el portal [i]Inofobaires 24[/i].

“D’ Alessio estalló y está en manos de la justicia su suerte. Sus revelaciones salpican al fiscal Carlos Stornelli y prácticamente destruyen la causa de los cuadernos y la dejan ver como un montaje, y el presidente no pide justicia sino abandonarla y para ello, echar al juez Ramos Padilla, y subrayar la labor de D’ Alessio, Stornelli y la banda que los acompaña. Lo cual significa el fin del Estado de Derecho, cosa que ya afirman dirigentes políticos y hombres de la justicia”, añadió Tarruellas.

Sostiene además que el mandatario “posee una particular obsesión por los espías. Tiene una causa por escuchas en la que fue favorecido por sus amigos de la justicia. Había llegado a utilizarlas para hacer seguimiento incluso de sus familiares. Si la AFI desaparece en estas circunstancias, podría armarse un nuevo organismo pero él no tendría el manejo absoluto del mismo, aunque algunos resortes fueran a manos de Carrió, de Vidal o algún dirigente de Cambiemos. Y él, por lo visto, quiere sostener el manejo absoluto, privado y personal del organismo”.