"A Prodigy se le puede amar u odiar, pero sólo intenta dar energía a la gente"

Juan José Olivares y Agencias
Foto: Ap
La Jornada Maya

Londres, Inglaterra
Martes 05 de marzo, 2019

"No somos un grupo pospunk. El punk es un estilo de vida, una manera de pensar. Lo cierto es que nos plantamos en el escenario con nuestros discos tal como somos, y pueden amarnos u odiarnos", señaló Keith Flint en alguna ocasión a [i]La Jornada[/i].

Prodigy, uno de los primeros grupos de música electrónica para las masas formado en 1990 en Essex, Inglaterra, destacó por cambiar los efectos predominantes del sonido [i]rave[/i] por el juego de metales.

Sin embargo, lo que hizo Flint diferente fue su expresión vocal. Él creó un estilo enérgico, intenso y catárquico que jugaba con lo que se conoce como el sonido [i]big beat[/i], con cortes de funk, club [i]dance[/i] y una actitud punk.

Ayer, el vocalista Keith Flint se suicidó a los 49 años, según confirmó su compañero Liam Howlett, a través de las redes sociales, información que reprodujeron muchos portales noticiosos y periódicos alrededor del orbe. La noticia causó conmoción en el mundo de la música popular.

Por medio del perfil de Instagram de la banda, Howlett escribió ayer que Flint “se quitó la vida el fin de semana. Estoy conmocionado, enojado, confundido y con el corazón roto... r.i.p hermano Liam #[i]theprodigy[/i]”.

La muerte del artista se dio a conocer luego de que la policía informó la mañana de este lunes que había encontrado el cuerpo del cantante en su domicilio, en Dunmow.

[b]Pionero, innovador[/b]

"Con gran conmoción y tristeza debemos confirmar la muerte de nuestro hermano y amigo Keith Flint. Un verdadero pionero, innovador y legendario. Siempre lo extrañaremos", indicó la agrupación en su cuenta de Twitter @[i]the_prodigy[/i].

La alineación original integraba a Liam Howlett, Maxim, Keith Flint y Leeroy Thornhill. Sus inicios atravesaron un momento específico; por un lado, el pop apuntaba a ser la corriente principal, y en otros espacios prevalecía el fenómeno [i]tecnorave[/i] británico.

Varios sencillos transcurrieron en la carrera del grupo que lo llevó a la cumbre de las listas en Inglaterra hasta la salida del álbum [i]The Prodigy Experience[/i]. Luego vino [i]Music for the Jilted Generation[/i], que entró de lleno en los primeros lugares de las listas británicas; fue número uno y disco de oro en su primera semana de lanzamiento.

“Llegamos a una escena [i]dance[/i] anémica, que necesitaba tener sonidos más duros, con mayores sonidos de guitarra. No quisimos repetir las fórmulas; queríamos sonar diferentes al mismo tiempo que armoniosos. Pero siempre escucharán con nosotros esos ruidos ásperos y ritmos duros que pueden patear y roquear”, precisó en la charla con este medio.

Durante 1994 y 1995 Prodigy recorrió gran parte del mundo y participó en festivales importantes, como el de Glastonbury. Flint despuntó como un consumado [i]showman[/i] de estilo punk, a la vista de las multitudes de la era digital. El disco que dio a la banda una posición a escala internacional fue [i]Fat of the Land[/i], lanzado en 1997. Consiguió el éxito en Reino Unido y Estados Unidos simultáneamente y se colocó en primer lugar de ventas en 22 países más y permaneció 12 semanas en el lugar número uno, celebrado con varios millones de discos vendidos en el mundo.

Con [i]Smack my Bitch Up[/i], de ese álbum, el grupo causó una controversia que afectó el ego de algunas estrellas del pop. Lo calificaron de misógino.

Flint afirmó: “hay que tomar riesgos hoy día, ya que el pop está por todos lados y hay que tratar de encontrar un estilo ecléctico que te diferencie de toda esa oleada de artistas efímeros que de pronto los hacen [i]rock stars[/i]. Nosotros más que hacer sonidos punk, lo que intentamos es dar a la gente la energía de la música, claro que eso nos da un acercamiento mayor a esos sonidos”.

[b]Momentos que parecen decir algo...[/b]

Pese a que muchos consideran que el contexto de las letras de sus canciones tiene que ver con aspectos sociales y políticos, la agrupación, en voz de Keith, aseguró que "ningún suceso político ni social la inspira. No somos una banda política ni pretendemos lanzar mensajes de este tipo con las letras; son sólo momentos que parecen decir algo de ese contexto y que se pueden ver así".

Entonces lo que inspira a Prodigy es "la misma música, la energía de ésta, el alma de la tecnología".

Sobre la escena electrónica de [i]mainstream[/i], Flint sostuvo que ahora “los pinchadiscos son como estrellas, sobre todo esos que hacen tecno y [i]house[/i]; tienen muchos seguidores”.

Aseguró que trabajar con otros artistas electrónicos o no ha dado a Prodigy su propio estilo, porque "pretendemos meter nuevas influencias que nos inspiren, pero al mismo tiempo mantener una identidad propia".

Sostuvo: "creo que cualquier banda tiene que ir en desarrollo, aunque no precisamente tenga que cambiar. Nosotros mantenemos la esencia que es la energía y la catarsis".

Dos décadas después de su trabajo [i]The Fat of the Land[/i], seguían atrayendo a las masas y sus actuaciones son codiciadas por los organizadores de festivales.

The Prodigy publicó a finales del año pasado su séptimo álbum, [i]No Tourists[/i]. Flint tenía prevista una gira por Estados Unidos.

Se desconocía de momento el impacto de la noticia en los proyectos de The Prodigy, que debía retomar próximamente su gira internacional para promover ese álbum.

"Triste de conocer la noticia relativa a Keith Flint. Siempre fue muy divertido y muy simpático con Tom (Rowlands) y conmigo cuando empezamos a hacer espectáculos juntos", tuiteó Ed Simons, del dúo electrónico The Chemical Brothers.