Dominante pitcheo hace historia en las Grandes Ligas

Corey Kluber se detuvo por un momento, antes de realizar su primer pitcheo en la novena entrada. “Tuve que respirar profundo después de calentar. Busqué calmarme un poco”, reconoció el pítcher apodado Klubot por su serenidad y sus movimiento de precisión mecánica, como los de un robot.

Luego, Kluber logró el sexto juego sin hit registrado esta temporada en las Grandes Ligas y el segundo en dos noches, para que los Yankees de Nueva York se impongan el miércoles 2-0 a los Vigilantes de Texas. “Fue muy divertido. Pienso que fue una noche especial”, comentó el lanzador. “Nunca había sido parte de un juego así. Ni siquiera había atestiguado uno, mucho menos lo había lanzado”.

Ha habido cuatro juegos sin hit en un periodo de 15 días. Los seis totales representan la mayor cifra a estas alturas de una campaña en la historia.

El derecho de 35 años, dos veces galardonado con el Cy Young de la Liga Americana, expidió un boleto en el tercer acto a Charlie Culberson. De no haber sido por ello, habría conseguido el juego perfecto.

Los Yankees (25-19) ganaron ayer de nuevo con gran pitcheo; Domingo Germán lanzó pelota de seis imparables y cinco ponches en siete entradas de un triunfo por 2-0.

Kluber pulió su joya de pitcheo una noche después de que Spencer Turnbull logró el doble cero ante los Marineros de Seattle. La vez anterior que se produjeron juegos sin hit en días consecutivos fue en 1969. En aquel año, Jim Maloney logró un partido sin incogible por Cincinnati el 30 de abril y Don Wilson hizo lo propio por Houston a la jornada siguiente.

“Fue algo realmente especial”, comentó el mánager yankee Aaron Boone.

De acuerdo con ESPN Stats & Info, los seis juegos sin hit son uno menos que el récord en una campaña en la era moderna y dos menos que la marca general de las Mayores, impuesta en 1884.

En su novena apertura con los Yankees, Kluber (4-2) repartió 10 ponches y efectuó 101 lanzamientos, de los que 71 fueron strickes. Su recta más potente alcanzó las 92.5 millas por hora, en una noche en que tiró además 31 curvas, 27 cutters, 23 sinkers, 18 cambios de velocidad y dos rectas de cuatro costuras. Fue el 12o. sin hit en la historia de los Yankees.

La temporada anterior, Kluber lanzaba en el montículo por los Vigilantes, cuando se lastimó, después de apenas una entrada de labor, en su debut con el equipo. Aquella fue la segunda campaña consecutiva de Kluber que debió abreviarse por lesiones.

Edición: Ana Ordaz