''Siempre hemos respondido ante la adversidad'': Minter

A.J. Minter, relevista de Atlanta, batió un puño en el aire cuando descendió del montículo tras recetar una anestesia que puso fin a una entrada en el primer juego de la Serie Mundial. Era apenas el tercer episodio de lo que sería otra larga noche de postemporada para el bulpén de los Bravos. Y fue otro triunfo conseguido por esos bomberos.

En su primer encuentro de un Clásico de Otoño desde 1999, Atlanta se impuso el martes 6-2 a los Astros de Houston.

Minter ciertamente no esperaba entrar tan pronto, mucho menos después de que el abridor Charlie Morton tenía una ventaja de 5-0. Pero Morton se sujetó la pantorrilla derecha después de ponchar al venezolano José Altuve en el comienzo de la tercera entrada.

Morton se marchó por una fractura de peroné sufrida un acto completo antes, al recibir el impacto de una rola del cubano Yuli Gurriel.

“Nos duele perder a Charlie”, reconoció Minter. “Pero si nos han observado durante todo el año, se darán cuenta que siempre hemos respondido ante la adversidad”.

Y los relevistas de Atlanta debieron responder, como lo han hecho en buena parte de la postemporada.

El zurdo Minter, quien se llevó la victoria, fue el primero de cuatro bomberos que se combinaron para limitar a los Astros a dos carreras, sirviendo ocho chocolates y entregando sólo un boleto en seis capítulos y dos tercios. “Simplemente tomamos esto de la misma forma. El siguiente que esté disponible debe hacer la tarea”, consideró Minter. “Cuando llegué en la tercera entrada sólo supe que debía cubrir la mayor cantidad de ‘innings’ que se pudiera. Traté de no pensar demasiado las cosas”.

El bulpén ha conseguido seis de las ocho victorias de Atlanta en este octubre, pese a que los Bravos eran uno de los equipos más tradicionalistas en términos de contar con un cuerpo definido de abridores.

Morton lanzó y sacó outs con una pierna fracturada 

Morton hizo 16 pitcheos y alcanzó muy buena velocidad con una pierna fracturada.

Con cuenta de 2-2, lanzó una curva que José Altuve dejó pasar para el tercer stricke. Luego, se tambaleó. El derecho de 37 años se sujetó la pierna con los dos brazos e hizo una mueca de dolor. Su participación en el Clásico de Otoño duró muy poco.

Tras sufrir una fractura del peroné derecho, una de las cartas principales del pitcheo de Atlanta se perderá el resto de la final de las Grandes Ligas. Se espera que el pítcher esté recuperado para el entrenamiento de primavera del próximo año.

Los campeones de la Liga Nacional deberán encontrar ahora un abridor para el quinto encuentro, el cual todavía no estaba garantizado antes del segundo partido de anoche. 

“Lo siento mucho por él (por Morton), es una gran persona y esperaba mucho tener la oportunidad de lanzar en esta serie”, comentó Brian Snitker, timonel de Atlanta. “Seguiremos adelante”.

Para el tercer juego, mañana en Atlanta, el astro Luis García se enfrentará a Ian Anderson.

Edición: Ana Ordaz