El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, saludó la tregua anunciada por el gobierno de Etiopía y los rebeldes en la región de Tigray (norte), al tiempo que exigió "mejoras inmediatas" sobre el terreno, dijo este viernes su portavoz.
Los rebeldes del Tigray, en conflicto desde hace 17 meses con el Ejército etíope, se comprometieron este viernes a respetar un alto al fuego, pocas horas después del anuncio por parte del gobierno de Addis Abeba de una "tregua humanitaria ilimitada".
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Tras deplorar que "el conflicto en Etiopía haya causado un sufrimiento terrible a millones de personas", Guterres "acoge con satisfacción la declaración del gobierno etíope (…) y el compromiso de las autoridades de Tigray", subrayó un comunicado su portavoz, Stéphane Dujarric.
Sin embargo, "estos avances positivos deben traducirse en mejoras inmediatas sobre el terreno", indicó el diplomático.
La ONU reclama la "restauración de los servicios públicos en Tigray, como bancos, electricidad y telecomunicaciones".
"El secretario general insta a todas las partes en el conflicto a aprovechar este progreso alentador para tomar las medidas necesarias (para establecer) un alto el fuego a largo plazo", acotó Dujarric.
Edición: Emilio Gómez
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