Si fuera por Argentina el Mundial de Qatar debería empezar hoy mismo.
Con cinco goles de su capitán Lionel Messi en la victoria 5-0 en un amistoso ante Estonia, la Albiceleste cerró el domingo una semana perfecta en la cual también vapuleó 3-0 a Italia en la Finalissima entre los campeones de Sudamérica y Europa.
A cinco meses del mundial, el equipo de Lionel Scaloni se va perfilando como uno de los favoritos al título, sostenido por un récord de 33 partidos invicto, un rendimiento colectivo cada vez más aplomado y un Messi decidido a ir por el trofeo que le falta.
Cerca de los 35 años, el astro se parece más al que muchos consideran todavía como el mejor futbolista del mundo cuando juega para su país que el Messi más terrenal del París Saint-Germain. “Ya no sé qué más decir sobre Messi, es muy difícil. No te quedan palabras para describirlo”, afirmó Scaloni tras la victoria sobre Estonia. Fue la segunda vez que el capitán convierte cinco anotaciones en su carrera (la primera fue con Barcelona frente a Bayer Leverkusen).
“Leo no es patrimonio de Argentina, sino del futbol mundial. El día que no juegue más lo vamos a extrañar”, acotó el entrenador que probablemente esté disfrutando de la mejor versión del Diez en la selección argentina desde su debut en 2006.
Con 86 tantos, Messi es el máximo artillero en la historia de Argentina y quedó cuarto en la tabla mundial de goleadores de selección, que lidera Cristiano Ronaldo con 117.
Edición: Ana Ordaz
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