El antónimo de explosión es implosión, una palabra que describe la acción que ocurre cuando un objeto colapsa y se contrae hacia su centro produciéndose el estallido de las paredes de una cavidad cuya presión es inferior a la externa.
Justo esa es la hipótesis que se maneja en el caso del sumergible que desapareció el pasado domingo con cinco personas y cuyos restos fueron hallados este jueves en la zona donde se introdujo al mar con la misión de explorar el pecio del Titanic, en el océano Atlántico. Expertos creen que la embarcación sufrió una fisura en el casco e implosionó.
En este caso, el colapso se habría producido debido a que la presión externa del mar a cierta profundidad superaba a la atmósfera interna del sumergible: una pequeña grieta en el casco o en el único mirador que tenía pudo provocar ese fatal cambio de presión, con las consecuencias ya conocidas.
Al nivel al que se encuentra el transatlántico, la presión del agua multiplica por 400 los valores de la superficie marina. A modo de comparación, la mordedura de un gran tiburón blanco ejerce una fuerza de casi 275 bares, según la publicación especializada Scientific American.
"Si eso es lo que sucedió, habría sucedido hace cuatro días”, explicó a la BBC Guillermo Söhnlein, cofundador de la empresa OceanGate Expeditions propietaria del submarino al indicar que cuando se opera a esas profundidades la presión es tan grande que cualquier fallo generaría una implosión instantánea.
El Titán sufrió una ''catastrófica implosión'': Guardia Costera de EU
El buzo Michael Harris suscribe esta teoría: “la fibra de carbono y el titanio con que está construido el submarino terminarían por ceder ante cualquier mínimo daño”, declaró el experto a Fox News.
Restos hallados son “consistentes” con una implosión
La intensa búsqueda del Titán, un batiscafo de 9 mil 525 kilogramos, cambió de rumbo este jueves cuando un dron submarino localizó “un campo de escombros” de la embarcación a 488 metros de la proa del navío que naufragó en 1912 y que se encuentra a unos 3 mil 800 metros por debajo de la superficie.
“Los escombros son consistentes con la pérdida catastrófica de la cámara de presión”, dijo el contralmirante John Mauger, jefe de la Guardia Costera de Estados Unidos, en una conferencia de prensa el jueves por la tarde.
Al confirmar que los restos pertenecían al Titan también se declaró la muerte de los cinco ocupantes: Paul-Henri Nargeolet, Hamish Harding, Stockton Rush, Shahzada Dawood y su hijo Suleman.
Magnates y aventureros: Ellos son los cinco fallecidos el el Titán
La implosión sí fue detectada: WSJ
En una implosión causada por un defecto en el casco o por cualquier otro motivo, el sumergible se derrumbaría sobre sí mismo en milisegundos, aplastado por la inmensa presión del agua. La muerte sería prácticamente instantánea para los ocupantes. Un sistema secreto utilizado por la Marina de Estados Unidos para descubrir submarinos enemigos detectó hace días la implosión del Titán, informó el diario The Wall Street Journal.
La Marina realizó un análisis de datos acústicos y detectó una anomalía consistente con una implosión o explosión en las inmediaciones de donde operaba el sumergible turístico cuando se perdieron las comunicaciones, según el informe, que citó a un funcionario naval. Si bien no es definitiva, esta información se compartió con el comandante responsable de la respuesta de emergencia del Servicio de Guardacostas. La Marina pidió que no se identificara el sistema secreto por seguridad nacional.
Quedan muchas preguntas sobre lo que ocurrió bajo el agua: ¿Cuándo y por qué ocurrió la implosión? ¿Se encontrarán los cuerpos de las víctimas alguna vez? ¿Cómo se podría haber evitado esta tragedia?
Así funcionaba el Titán
El vehículo que implosionó era manejado con un controlador de videojuegos, según revelaron conocedores del tema a Reuters, quienes detallaron que desde el barco nodriza Polar Prince los trabajadores de OceanGate rastrean la ubicación de Titán y envían mensajes de texto al piloto con instrucciones de navegación. Esta comunicación se perdió el domingo, dos horas despúes de la inmersión.
El sumergible perdido tenía un sistema de soporte vital suficiente para mantener con vida a cinco personas hasta por 96 horas y estaba capacitado para viajar a una velocidad de tres nudos (tres millas y media por hora) utilizando propulsores eléctricos.
Su diseño muestra que estaba equipado con potentes luces LED, un sistema de navegación por sonar y un equipo de cámara de alta gama, además de que contaba con un ojo de buey para ver hacia el exterior.
Las paredes de fibra de carbono de Titán tenían un grosor de 13 cm (5 pulgadas) y el recipiente está cubierto en cada extremo con cúpulas de titanio, según David Pogue, un periodista de CBS News que viajó en el Titán el año pasado. Pogue dijo que fue obligado a firmar una exención de responsabilidad que describía la embarcación como "experimental" y reconocía el riesgo de lesiones o muerte.
Una vez que los pasajeros están dentro, la escotilla se cierra con cerrojo. Los pasajeros generalmente se sientan en el suelo, apoyando la espalda contra una pared curva. Hay un baño rudimentario a bordo.
Se lanza desde una pequeña plataforma que se puede llevar al mar a bordo de un barco comercial y se sumerge unas decenas de metros bajo la superficie.
La "experiencia" de 10 horas ofrecida por la empresa OceanGate Expeditions tenía un valor de 250 mil dólares y, según consta en documentos presentados por la empresa, al menos 46 personas habían realizado la exclusiva visita a los restos del Titanic entre 2021 y 2022.
Con información de Ap y Reuters
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