Arozarena vive histórica noche en memorable duelo de Serie Mundial

Horas después de reescribir los libros de historia de la Serie Mundial con otro home run, Randy Arozarena se tropezó para entrar en las crónicas de octubre que nunca se olvidan.

¿Acaso hay algo que este novato no pueda hacer?

La carrera de la victoria que la sensación cubana anotó en un frenético noveno episodio será tema de conversación por muchos años, luego que Rays de Tampa Bay vencieron 8-7 a los Dodgers de Los Ángeles la noche del sábado para igualar la Serie Mundial a dos victorias por bando.

“Randy no está acostumbrado a correr así. Lo normal es que trote”, dijo el mánager de Rays, Kevin Cash.

Vale recordar que previamente en el encuentro, el jardinero de 25 años eclipsó a Barry Bonds, entre otros, al adueñarse del récord de más cuadrangulares en una sola postemporada. También terminó la noche como el líder histórico de imparables.

El cuádruple solitario de Arozarena al abrir el cuarto acto produjo la primera carrera de Rays, y su noveno palo de vuelta entera de la postemporada, con lo que dejó atrás el récord de ocho que compartían Bonds (2002, San Francisco), Carlos Beltrán (2005, Houston) y Nelson Cruz (2011, Texas).

Ninguno de ellos acabó como campeón de esas Series Mundiales; sin embargo, Arozarena y Rays estaban igualados con los Dodgers al empezar el quinto choque de anoche y garantizaron llegar más lejos que en su única participación previa en el Clásico de Otoño, saldada en una derrota en cinco juegos ante Filadelfia en 2008. El sexto duelo se disputará mañana martes en Arlington.

“Significa mucho para mi pasar a la historia y alcanzar el récord, pero lo más importante fue que ganamos el juego y empatamos la serie”, expresó Arozarena.

Su tercer incogible de la noche, un sencillo para abrir el sexto, empezó a servir la bandeja para el bambinazo de tres carreras de Brandon Lowe que inició un tira y afloja en los últimos cuatro episodios.

Su turno más importante llegó en el noveno, cuando la bujía de Tampa Bay negoció una base por bolas tras siete lanzamientos del cerrador Kenley Jansen con dos outs. Con frialdad, Arozarena dejó pasar un pitcheo apenas afuera de la zona y dos strikes encima.

Lo que siguió fue la dramática secuencia que puso fin a uno de los encuentros de Serie Mundial más emocionantes de los últimos años, tras el sencillo remolcador de Brett Phillips.

El jardinero central Chris Taylor fildeó mal la pelota hasta que finalmente pudo tirar hacia el plato, con Arozarena doblando por tercera. Parecía que iba a ser puesto fuera fácilmente cuando se tropezó y cayó a mitad de camino, pero el receptor Will Smith no pudo atrapar el tiro de relevo del primera base Max Muncy, permitiendo que Arozarena se deslizara quieto.

“Tenía que regresar (a tercera) porque el juego ya se había empatado y tenía que jugar el rundown (ser perseguido). Me percaté que la pelota se había escapado hacia atrás y anoté”, relató sobre su recorrido en las bases.

Tirado en el piso, Arozarena se puso a darle golpes al plato mientras sus compañeros salieron disparados de la cueva para celebrar con él.

Conectó su octavo home run de esta postemporada la noche previa ante Jansen, remolcando una carrera sin importancia en la derrota 6-2 en el tercer desafío.

Arozarena hizo más historia ayer al romper el récord de 26 incogibles en una sola postemporada que compartía con Pablo Sandoval, quien lo logró en 17 partidos, cuando San Francisco venció a Kansas City en el séptimo choque de la Serie Mundial de 2014. El cubano, en su juego 19, llegó a 27 inatrapables con sencillo remolcador frente a Clayton Kershaw que acercó a Tampa Bay 3-2 en la tercera entrada. 

Cash argumentó que todos los home runs y hits han dejado en segundo plano otro aspecto del impacto de Arozarena.

“Estamos hablando de la ofensiva de Randy por buenos motivos debido a todo el daño que ha causado en la postemporada”, indicó Cash. “Pero hemos visto que muestra paciencia. Tiene una buena idea de lo que los pítchers quieren hacer cuando lo enfrentan”.

Edición: Emilio Gómez