Notimex
Foto: Cuartoscuro
La Jornada Maya
Dallas, Estados Unidos
Miércoles 21 de diciembre, 2016
Autoridades de salud de Texas anunciaron que a partir del próximo mes bloquearán los fondos estatales a Planned Parenthood, la organización sin fines de lucro que brinda servicios de salud a miles de mujeres de bajos recursos.
Funcionarios estatales de salud emitieron la víspera un aviso legal final, notificando a la organización que quedará impedida de recibir fondos del programa de seguro de salud Medicaid, a través del cual proporciona servicios de planificación familiar y de salud.
La acción podría afectar a miles de mujeres de bajos ingresos en Texas. Planned Parenthood había recibido este año 3.1 millones de dólares en fondos de Medicaid, pero los recursos dejarán de ser provistos a partir de enero de 2017.
Yvonne Gutiérrez, directora ejecutiva de Planned Parenthood Texas, dijo que la organización continuará atendiendo a pacientes de Medicaid y buscará que un juez emita una orden preliminar que le impida a Texas recortar los fondos.
La batalla por la financiación de los servicios de salud de Planned Parenthood, que están separados de los servicios de aborto que no reciben fondos públicos, comenzó en octubre de 2015 cuando el gobernador Greg Abbott y funcionarios estatales de salud advirtieron que buscarían cortar la financiación de Medicaid.
El 90 por ciento de los fondos del programa Medicaid provienen del gobierno federal, pero son administrados por las autoridades estatales.
Al anunciar su decisión, Abbott y las autoridades de salud citaron videos que provocaron controversia en los que presuntamente se evidenciaba el comercio de tejido fetal por parte de funcionarios de Planned Parenthood.
Además hicieron acusaciones no específicas de fraude, como prueba de "actos de mala conducta" de la organización.
Pero la amenaza del estado parecía inicialmente ser una finta y pasó más de un año sin que las autoridades procedieran a emitir una notificación final.
Mientras tanto, Planned Parenthood continuó proporcionando servicios de salud, incluyendo control de natalidad y exámenes de detección de cáncer a aproximadamente 11 mil mujeres de bajos ingresos.
Pero ahora, en el aviso final, el Inspector de Salud y Servicios Humanos de Texas, Stuart Bowen, dijo que los videos que mostraban a funcionarios de Planned Parenthood discutiendo la venta de tejido fetal para la investigación, mostraron que el organismo “violaba las leyes estatales y federales”.
Bowen afirmó que los videos revelaron que Planned Parenthood tiene un historial de "desviarse de los estándares aceptados" para obtener muestras de tejido para los investigadores y una "voluntad de cobrar más que los costos incurridos para obtener tejido fetal", entre otras violaciones.
"Su mala conducta está directamente relacionada con si usted está calificado para proporcionar servicios médicos de una manera profesional, segura, legal y ética", escribió Bowen en el comunicado.
"Sus acciones violan los estándares médicos generalmente aceptados, como se refleja en la ley estatal y federal, y son violaciones del programa de Medicaid que justifican la terminación", indicó.
Planned Parenthood ha negado en forma categórica esas afirmaciones y ha criticado los videos que el Estado está señalando como evidencia, al sostener que fueron fuertemente editados para implicar malversación.
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