Mala fe de Estados Unidos

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Foto: Afp
La Jornada Maya

Bruselas, Bélgica
Lunes 2 de mayo, 2016

Las negociaciones para crear una vasta zona de libre comercio entre Estados Unidos y la Unión Europea están atascadas debido a discrepancias en torno a temas importantes, con lo que se hace poco probable que se concrete un acuerdo antes de que culmine la presidencia de Barack Obama.

Ante la cercanía de las elecciones presidenciales estadunidenses, el jefe de los negociadores europeos, Ignacio García Bercero, advirtió que "hay todavía mucho, mucho por hacer antes de que podamos dar por concluidas estas negociaciones".

Tras el cierre de la décimo tercera ronda de negociaciones la semana pasada, García Bercero advirtió que perduran desacuerdos fundamentales sobre temas como el acceso de mercado para las firmas europeas y las protecciones al sector agrícola.

Algo que amargó el ambiente fue la difusión por parte de Greenpeace de documentos confidenciales que según el grupo ambientalista demuestran mala fe por parte de Estados Unidos y una aquiescencia por parte de la UE. La publicación de algo confidencial socavó el sentido de confianza la mutua, expresó García Bercero.

"¿Acaso esto perturba las negociaciones? Pues sí, por supuesto. Esto no es algo que ayuda a crear confianza en el proceso de negociaciones", indicó a reporteros.

Greenpeace aseguró el lunes que las 248 páginas que obtuvo demuestran cómo Estados Unidos está tratando de presionar a la UE para que acepte sus condiciones, diluya las protecciones a los consumidores y apruebe leyes más convenientes para los empresarios.

Ambas partes negaron las acusaciones. García Bercero aseguró que varias de las denuncias de Greenpeace son "falsas" y el representante comercial estadounidense Trevor Kincaid enfatizó: "las interpretaciones que se han dado a estos textos aparentan ser, en el mejor de los casos, engañosas y en el peor de las casos, totalmente equivocadas".

El bloque socialista en el Parlamento Europeo, que no suele ser afín a los intereses corporativos, aseveró el lunes que los documentos no revelan gran cosa.

"En ninguna parte aquí hay algo que demuestre que la UE está siendo sumida ante las demandas de Estados Unidos", estimó David Martin, parlamentario por el grupo S&D. "Por ahora, estos documentos solo contienen posiciones hipotéticas y propuestas de tácticas, pero nada de información concreta".

Aun así, es una indicación más de los desafíos para un acuerdo que lleva ya más de un año de retraso. El pacto, que consolidaría vínculos entre regiones que en suma tienen más de 800 millones de habitantes y son responsables de la mitad de la producción económica mundial, ha sido duramente criticado, especialmente en Alemania, la principal economía entre los 28 integrantes de la UE.

Hay además temores de que el acuerdo será chivo expiatorio en la retórica que está caracterizando la campaña electoral de Estados Unidos, donde abundan los llamados al proteccionismo económico y el aislamiento político.