Primera sesión del juicio contra independentistas catalanes

Armando G. Tejeda
Foto: Afp
La Jornada Maya

Barcelona, España
Martes 18 de diciembre, 2018

El Tribunal Supremo español dio el primer paso para el inicio del histórico juicio contra 18 líderes independentistas catalanes. Será, para muchos, el “juicio del siglo”, en el que se juzgará por los delitos de rebelión, malversación y desobediencia a los impulsores y ejecutores de la declaración unilateral fallida de secesión del 27 de octubre del 2017. El fiscal español advirtió que dicho proceso supuso “un atentado grave al interés general de España” y que por tanto sus responsables deben ser juzgados ante el alto tribunal.

En lo que se llama en la jerga judicial la “vista de previo pronunciamiento”, ante la Sala del Tribunal Supremo, presidida por el juez Manuel Marchena, los magistrados escucharon las posturas de los abogados de los 18 acusados, así como de la Fiscalía General del Estado y de la acusación particular. Mientras que los abogados de los líderes independentistas rechazaron las acusaciones imputadas, sobre todo la “rebelión”, también alegaron que incluso en el caso de que hubieran cometida dichos ilícitos la institución adecuada para su juzgamiento es el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, una vez que fue en esta circunscripción territorial donde se habrían perpetrado los supuestos delitos.

Tanto la acusación particular como los fiscales que representan al Estado español defendieron justo lo contrario; es decir, que hay indicios sólidos de la presunta vinculación de los imputados en la vulneración de la ley a través del intento de independencia de una parte del territorio, incurriendo así en los delitos de rebelión, malversación de caudales públicos y desobediencia.

Una vez que fueron escuchadas todas las posturas, ahora serán los jueces del Tribunal Supremo los que decidirán si son o no competentes para juzgar a los líderes catalanes o si, por el contrario, desestiman la causa en su jurisdicción y la remiten a otro órgano judicial. Entre los políticos catalanes imputados en la causa se encuentran los principales actores del proceso de secesión fallido del 2017, entre ellos el ex presidente Carles Puigdemont -actualmente fugado en Bélgica y quien mueve los hilos del actual gobierno catalán, de Quim Torra, desde la distancia-; el ex vicepresidente Oriol Junqueras, en prisión desde hace más de un año y que desde su reclusión sigue siendo el máximo líder y referente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), el tercer partido en votos de la región; la ex presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell; además de los ex consejeros Joaquim Forn, Jordi Turulll, Marixel Bassa, Marixel Borras, Raül Romeva y Josep Rull, además de los ex presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Ómnium Cultural, Jordi Sánchez y Jordi Cruixart.

Durante su alegato, el fiscal Jaime Moreno advirtió que “los fines de la rebelión son derogar la Constitución española y declarar la independencia. Derogar la Constitución está en la diana de la estrategia independentista. El resultado afecta a todo el territorio. Es un atentado grave al interés general de España”, con lo que justificó que el juicio se desarrolle en el Tribunal Supremo, con sede en Madrid.

Una vez resuelta la vista previa y si finalmente el tribunal decide asumir el caso, lo más probable es que los nueve políticos que están en prisión sean trasladados de Cataluña a Madrid para acudir a las vistas judiciales. Cabe recordar que cuatro de ellos decidieron iniciar una huelga de hambre desde hace tres semanas en protesta por la falta de garantías en su situación penal. El resto de los imputados o están refugiados en otros países europeos que no han concedido la extradición a España, como Bélgica, Reino Unido y Alemania, o están en libertad bajo fianza.

[b]Crece la tensión en Cataluña[/b]

El inicio del juicio en Madrid y la celebración en Barcelona del próximo Consejo de Ministros del gobierno español, del socialista Pedro Sánchez, provocó que creciera la tensión en Cataluña, sobre todo en Barcelona, donde la sede de la Lonja -donde se celebrará la reunión ministerial- ya está vigilada las 24 horas del día y pese a eso ya han aparecido pintadas de repulsa al gobierno español.

Los Comités de Defensa de la República (CDR´s) ya se están organizando para sembrar el caos ese día en la ciudad, con el objetivo de bloquear los accesos al inmueble e impedir así la celebración de la reunión. Además 21 sedes del Partido Socialista de Cataluña (PSC) aparecieron con pintadas amenazantes y de repulsa, además de registrarse diversos actos de tensión en la Universidad de Barcelona, donde unos estudiantes que instalaron una carpa informativa a favor de la “unidad de España” fueron amenazadas de muerte por otros estudiantes independentistas. En vista de la situación, el gobierno español anunció que movilizará para la reunión ministerial del próximo viernes hasta mil agentes policiales de otros puntos del país, que se sumarán a los nueve mil agentes autonómicos que vigilaran el encuentro en Barcelona.