Dpa y Ap
Foto: Ap
La Jornada Maya
Washington, Estados Unidos
Jueves 5 de julio, 2018
En una nueva serie de tuits contra la inmigración y el sistema migratorio del país, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comparó hoy la deportación de indocumentados sin darles el derecho al proceso legal debido con mantener libre de personas ajenas el jardín delantero de casa.
El presidente exigió al Congreso que “¡ARREGLEN NUESTRAS DEMENTES LEYES DE INMIGRACIÓN YA!”.
Las leyes de inmigración vigentes son “dementes”, dijo Trump. Añadió que cuando la gente entra ilegalmente al país, hay que decirles “FUERA” y echarlos, “tal como si estuvieran en el jardín de tu casa”.
"Cuando personas con o sin hijos entran en nuestro país, hay que decirles que se vayan sin que nuestro país se vea obligado a soportar un proceso legal largo y costoso", escribió Trump en Twitter a primera hora de este jueves.
"Hay que decir 'FUERA' a la gente y tienen que irse, como si estuvieran en nuestro jardín delantero", añadió.
No es la primera vez que el presidente de Estados Unidos defiende la expulsión de inmigrantes indocumentados sin que tengan que pasar por el proceso legal de deportación.
"Contratar a miles de 'jueces' no funciona y no es aceptable, ¡somos el único país del mundo que lo hace!", escribió hoy en Twitter refiriéndose a ese proceso.
Los inmigrantes que entran en Estados Unidos -legal o ilegalmente- pueden pedir asilo si pueden probar la existencia de un miedo creíble a volver a sus países. Las peticiones son evaluadas primero por un oficial y después trasladadas a una corte. El procedimiento puede llegar a durar años.
La mayor parte de los inmigrantes que entran ilegalmente a Estados Unidos proceden de Centroamérica y, en virtud de las leyes en vigor, no pueden ser devueltos a México automáticamente si son detenidos tras el cruce, como sí pueden hacer las autoridades estadounidense con los mexicanos.
Estos nuevos tuits de Trump llegaron mientras sigue la controversia por la separación de familias migrantes en la frontera.
La separación desde el 19 de abril de más de 2 mil 300 niños de sus padres después de ser arrestados estos tras entrar ilegalmente en Estados Unidos generó una ola de indignación dentro y fuera del país norteamericano que obligó al presidente a dar marcha atrás en una política pensada para desincentivar la llegada de inmigración ilegal a su país.
La mayoría de las familias que cruzan sin papeles procede de Honduras, El Salvador y Guatemala, los países del violento Triángulo Norte de Centroamérica.
Trump firmó un decreto hace dos semanas para frenar las separaciones, pero este no pone fin a la persecución penal de los indocumentados, sino que establece que los niños sean encarcelados con ellos.
Muchos niños separados hasta la firma del decreto continúan lejos de sus padres en centros de acogida repartidos por 17 estados norteamericanos. Una juez de California ordenó la semana pasada al Gobierno que los reúna con sus padres en un plazo máximo de 30 días.
Según informó hoy la cadena de televisión CNN citando a un funcionario federal que no identificó, la administración está realizando test de ADN como parte del proceso de reunificación.
Organizaciones de ayuda a los inmigrantes criticaron la medida porque consideran que servirá al Gobierno para vigilar a los niños por el resto de sus vidas.
El encendido del pebetero de los JO se realizará en una ceremonia a orillas del río Sena, el próximo 26 de julio
Reuters
Fue amenazado anteriormente e incluso denunció los hechos
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En el lugar se registra una fuerte ola de calor, factor que puede degradar estabilidad de explosivos
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