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La Jornada
19/11/2025 | Ciudad de México
Ángeles Cruz Martínez
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), también conocida como enfisema o bronquitis crónica, es la cuarta causa de muerte en México, entre 2020 y 2024 ha causado más de 24 mil muertes. El padecimiento forma parte del plan de acción de la Organización Mundial de la Salud (OMS), para la prevención y control de males no transmisibles y los Objetivos para el Desarrollo Sostenible que plantean reducir en un tercio las muertes prematuras por esta causa.
El tercer miércoles de noviembre se conmemora el Día Mundial de la EPOC a iniciativa de la OMS con la finalidad de crear conciencia sobre la relevancia de la enfermedad a la que se identifica como un “enemigo silencioso” que, si bien no se cura, es posible prevenir.
Información del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), señala que entre los factores de riesgo está el tabaquismo, la contaminación ambiental, laboral y en el caso de las mujeres, principalmente, la exposición prolongada al humo de leña en las zonas rurales.
Advierte que esta práctica es frecuente todavía en Oaxaca, Guerrero, Michoacán y Chiapas, aunque ha habido esfuerzos para sustituir los fogones por estufas con mecanismos para evitar el contacto con el humo.
De ser el caso, existen medicamentos que logran mantenerla bajo control y las personas deben tomar medidas como dejar de fumar y/o de exponerse al humo de leña.
Aunque la EPOC es más frecuente en hombres, casi el doble con respecto a las mujeres, esa diferencia se ha ido reduciendo, pues cada vez más adultas, con antecedente de exposición al humo de leña, llegan a los hospitales de alta especialidad con daño pulmonar.
Especialistas del INSP advirtieron que los afectados tienen alto riesgo de presentar afecciones cardiovasculares, cáncer de pulmón, debilidad en los músculos y osteoporosis, entre otros.
Por eso la importancia de obtener un diagnóstico temprano y controlar la progresión de la EPOC, la cual se diagnostica mediante un estudio de espirometría que consiste en medir la capacidad de la función pulmonar. Se evalúan los volúmenes y flujos de aire en una exhalación forzada.
El desafío radica en que los pacientes conozcan su condición de salud, porque tienden a no hacer caso de los síntomas y suelen dar justificaciones como que tienen “una tos de fumador”, que les falta el aire por el mismo tabaquismo o por su edad, comentó Marco Polo Macías, gerente médico del laboratorio farmacéutico GSK México.
Comentó que ocho de cada 10 afectados desconoce que tienen EPOC y en la mayoría obtienen el diagnóstico en etapas tardías. También destacó la importancia de hacer caso a los malestares provocados por la EPOC y sobre todo, evitar fumar o vapear, así como reducir la exposición al humo ajeno.
De igual forma, resaltó que es importante que las personas realicen ejercicio físico y se apliquen las vacunas contra influenza, covid-19 y neumonía.
Edición: Ana Ordaz