Representar a Jesús, "una oportunidad de demostrar amor a Dios"

Connie López
Foto: Fernando Eloy
La Jornada Maya

Cancún, Quintana Roo
Miércoles 21 de marzo, 2018

“Es una oportunidad de demostrar a Dios el amor que le tengo”, dijo el cancunense Antonio Pierre Monroy, de 22 años, estudiante de arquitectura en la Universidad Anáhuac, quien por segunda ocasión llevará en sus hombros la responsabilidad de representar a Jesús en el vía crucis viviente de Playa Delfines.

El joven, rostro tranquilo, gusta de tocar la batería, cantar, divertirse y pasar tiempo con su novia; es el segundo de cuatro hermanos y está en preparación para representar a Jesús en “la Pasión y Muerte de Jesucristo” el próximo 30 de Marzo.

Antonio estuvo consagrado a la vida cristina por cuatro años discerniendo si su vocación era el sacerdocio; a pesar de no seguir con los estudios religiosos, continúa profesando sus creencias, demostrando su fe en Dios.

El intérprete de Jesucristo señaló que del año pasado a la fecha, su vida ha cambiado y todos los días busca dar lo mejor de sí, ya que “la santificación es una forma de demostrarle a Dios que lo amas. A veces la gente no entiende mucho, pero lo más importante es buscar la perfección en la vida diaria”.

El joven protagonista contó que viajó a San Juan de los Lagos donde sintió la pasión y el entusiasmo que tenían los intérpretes de los papeles, lo que dio paso a pensar, en alguna vez, representar a Jesucristo.

Si bien comentó que vive dentro de un ambiente católico y cuenta con el apoyo de sus padres y hermanos, -lo cual es un aliciente importante para llevar al cabo esta representación-, el motivo mayor es brindar fe a los feligreses a través de esta personificación.

“Estoy consciente del reto; el año pasado fue muy pesado, es algo que desgasta físicamente pero es algo importante para tantas personas, y eso me alienta a estar ahí, a mejorar mi vida espiritual y ser mejor persona para que pueda ser instrumento y pueda transmitir el amor de Dios a través de mí”.

El actor comentó que su preparación consiste en leer, ejercitarse, estar consiente de sus actos en la vida diaria, hacer bien las cosas, trabajar y estudiar; pero sobre todo tener ese vínculo con Dios que permita llevar el mensaje de amor que protagonizó Jesucristo.

A decir del protagonista “esta es una oportunidad de demostrar a Dios el amor que le tengo”, y seguirá personificándolo hasta que las circunstancias se lo permitan. Dijo que dentro de todo el contexto, busca también llevar este mensaje de amor y de unidad a los jóvenes que han sido rebasados por la cotidianidad y no ven el cariño que Dios les profesa.

Reconociendo sus nervios, el joven actor confió en que esta puesta no sólo refrende la fe de los feligreses, sino también pueda promover el destino como uno de los lugares donde más se vive la fe.