El autoerotismo debe ser enseñado

Joana Maldonado
La Jornada Maya

Chetumal, Quintana Roo
Viernes 31 de mayo, 2019

Aunque se reconocen sus múltiples beneficios físicos y psicológicos, la masturbación es una práctica bajo el estigma de “prohibido” y genera en algunos casos culpabilidad ante el placer de quien lo practica, explica la sexóloga Beatriz Centeno García.

Desde 1995, mayo es considerado el mes de la masturbación. Se instauró en San Francisco, Estados Unidos, a raíz del cese de la médico Joycelin Elders, quien tras un discurso en el Día Internacional del Sida fue interrogada sobre el tema, a lo que respondió que lo consideraba algo propio de la sexualidad humana y que debería ser enseñado.

Lo anterior motivó a que una compañía dedicada a elaborar juguetes sexuales designara mayo como el mes de la masturbación en EU, conmemoración que se extendió en los últimos años hacia otros países.

Beatriz Centeno García, sicóloga con especialidad en sexología clínica, con base en Playa del Carmen, habló para [i]La Jornada Maya[/i] sobre la masturbación, tema que aún se considera como “prohibido u oculto”.

“Es un tema importante del que se tiene que hablar y debe ser abierto; de alguna manera sabemos que las personas nos masturbamos pero da como vergüenza manifestarlo abiertamente, hablar de eso es muy complicado aunque lo hagamos todos los días, aún y cuando estamos en pareja”, explicó la sexóloga.

La profesional de la sexualidad consideró que muchas personas creen que si tienen pareja, la masturbación se hace innecesaria, pero es una creencia falsa pues sostuvo que la acción de autocomplacerse en el ámbito sexual es sano, porque es una manera de conocerse a sí mismo y reconocer las partes del cuerpo que brindan mayor placer.

Y pese a ser una forma de brindarse amor, tiempo y atención a uno mismo, la masturbación es un acto de placer que a la fecha causa culpa.

“Hablar de placer, en nuestra cultura y educación se vive con culpa, por eso no hablamos de la masturbación porque no está bien”, expresó.

La especialista sostiene que incluso, aunque muchas personas asumen esto como algo “normal”, no se lleva a la práctica “porque no nos permitimos tener estos espacios con nosotros mismos”. Añadió que es importante que se le retire la connotación negativa y se subraye lo positivo por cuanto provee de placer.

Citando a la sexóloga Fabiola Trejo, la especialista refirió que la masturbación es un placer autogestivo que se refiere al que uno mismo se brinda y que genera independencia emocional.

“A veces buscamos relaciones en las que no nos sentimos del todo bien y por sentir este placer nos mantenemos vinculados, por eso es que vivir el placer independiente sea importante. Hay mucho estigma y no nos permitimos hablar del placer, incluso en los no sexuales como el comer”, destacó.

La sicóloga especialista refirió que el tema tiene relación con la salud sexual que representa bienestar. Para ella, socialmente aún falta construir y reconstruir una perspectiva positiva de la sexualidad y lo que implica, como placer, pasarla bien, hablar de orgasmos y los beneficios que proveen.

Culturalmente, abundó, esta práctica está más permitida en los varones a quienes se les permite “ser sexuales” en todos los ámbitos de su vida pues “las mujeres entre menos placer, somos más valoradas y en esta parte los estereotipos de género han sido muy importantes, porque a los hombres se les permite más aunque las mujeres lo practiquen”.

En términos generales, los hombres practican la masturbación más que las mujeres, pero para el sexo femenino el tema es tabú.

La sexóloga añadió que bajo este contexto, se dejan de lado los beneficios físicos y sicológicos que tiene el autoplacer. “Te puede quitar el dolor, el estrés baja mucho, estás como más contento o contenta, hasta la piel se ve diferente, más fresca gracias a la parte hormonal, un orgasmo nos cambia el día, la sonrisa te sale y la vida se disfruta más”, acotó.

Centeno García finalmente apuntó que es importante que se hable del tema con los adolescentes quienes aún enfrentan muchos mitos sobre la masturbación y porque en esa medida les permitirá practicar sexo seguro, sin riesgo de embarazo ni enfermedades de transmisión sexual al otorgarles la vivencia del placer como algo normal.