Texto y foto: La Opinión Quintana Roo
La Jornada Maya
Chetumal, Quintana Roo
Sábado 26 de agosto, 2017
La emisión por parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos de un “warning” de viaje contra las ciudades del norte de Quintana Roo, parece haber desatado una nueva ola de violencia e inseguridad.
El “warning” fue emitido el pasado martes 22 de agosto, y desde ese día se inició una sucesión de hechos violentos que ha llamado la atención del gobierno. No se trata sólo de los hechos de violencia ligada al crimen organizado, sino los lugares donde han sucedido alguno de ellos, de gran impacto mediático, lo que hace pensar que no se trata de hechos aislados.
La mencionada alerta aludía al incremento de la tasa de homicidio en el estado y a la posibilidad de enfrentamientos entre grupos del crimen organizado en lugares públicos, lo que pudiera resultar peligroso para turistas. Y resultó casi premonitorio.
La noche del miércoles, en la esquina de la Quinta Avenida y la calle 20, en pleno corazón turístico de Playa de Carmen, hubo un intento de ejecución que causó pánico en la zona, de mucho tránsito de turistas.
Un día más tarde, se dio el espectacular robo a la joyería Diamonds, otra vez en la Quinta Avenida, ahora a la altura de la calle 32. Se trató de un hecho de enorme espectacularidad que llamó la atención a todos los turistas que caminaban por la zona.
A la vez que eso sucedía en Playa del Carmen, en Cancún la ola de ejecuciones fue imparable.
La noche del jueves hubo dos ejecutados: uno en la región 220 y otro en la 519. El viernes a la madrugada un hombre fue ejecutado en un motel de la avenida López Portillo y horas más tarde, hubo un intento de ejecución en la región 219, y un ejecutado en Valle Verde. Según consignó un periódico local, en ese mismo lugar se dio el levantón de dos personas.
Al mediodía del mismo viernes, la Riviera Maya volvió a ser testigo de un hecho espectacular. Una camioneta tipo Van con cuatro personas, levantó a otras dos a la altura del hotel Iberostar Playa Paraíso, aunque luego de un operativo, las fuerzas de seguridad agarraron a los secuestradores en Villas Morelos II, en una supuesta casa de seguridad.
Pero el hecho que generó las mayores dudas fue el ataque de esta madrugada en la zona hotelera de Cancún. En las primeras horas de este sábado, un grupo de personas encapuchadas (unas versiones hablan de dos y otras de cuatro personas) atacó a balazos una camioneta en plena zona hotelera, a la altura del mercado Coral Negro, en Punta Cancún.
El hecho generó una gran movilización policial y el cierre de algunos bares y discotecas de la zona.
Desde noviembre no había ocurrido algo así en la zona hotelera de Cancún, cuando hubo un ataque a balazos a tres personas dentro del bar Mandala.
Si bien no se trata de hechos extraños, en el Gobierno creen que el grado de exposición pública y mediática de los hechos, sobre todo los ocurridos en las zonas turísticas, no es casualidad.
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