Discuten con representantes de comunidades redistritación en QRoo

En Quintana Roo se trabaja en una redistritación electoral federal para crear un distrito indígena sumando a los municipios de Tulum, Othón P. Blanco, José María Morelos, Bacalar y Felipe Carrillo Puerto, informó Claudia Rodríguez Sánchez, vocal ejecutiva de la junta local del Instituto Nacional Electoral (INE) en el estado. Por ello el lunes pasado se realizó una reunión consultiva previa, libre e informada con los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanas de la entidad.

La funcionaria dio a conocer que en la reunión se presentaron a las autoridades indígenas representativas y a las autoridades estatales y municipales del estado los proyectos de distritación electoral, con el objetivo de recibir las opiniones, propuestas y planteamientos sobre la forma cómo podrían quedar ubicados sus pueblos y comunidades dentro de los distritos electorales federales y locales y sobre la localidad que sería la cabecera distrital.

Detalló que la redistritación está establecida dentro de la Constitución Mexicana que indica que después de cada censo que realice el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) debe hacerse este proceso, que es derivado de la movilidad poblacional en los 300 distritos electorales del país y conforme va incrementando la población se va haciendo los flujos migratorios.

Mencionó que hay entidades que reciben mayor número de la población y otras que van perdiendo y en este caso en Quintana Roo se mantiene con cuatro distritos electorales federales (dos con cabecera en Cancún, uno en Playa del Carmen y otro en Chetumal) y además ya se hizo contacto con el consejo general del INE y se aprobó la redistritación.

“Estamos clasificadas todas las entidades en bloque y Quintana Roo se encuentra en el bloque seis derivado de las elecciones que tuvimos el pasado 5 junio. Ya se generó el primer escenario de distritación, para esto hicimos un foro informando a las comunidades y líderes indígenas representativos de este ejercicio y con esta reunión consultiva en donde les vamos a enseñar cómo están previstos los escenarios de la redistritación para que ellos puedan hacer las observaciones pertinentes”, acotó.

Cabe mencionar que el proceso de la consulta consta de cinco etapas: actos y acuerdos previos, sesión informativa, etapa deliberativa, sesión consultiva y etapa de valoración de las opiniones y sugerencias. Una vez concluidas, las comunidades y pueblos indígenas y afromexicanos a través de sus autoridades municipales, tradicionales o comunitarias, de acuerdo con sus propias formas de deliberación y toma de decisiones, reflexionarán la información brindada para decidir su acuerdo o desacuerdo respecto de la ubicación de su municipio en un distrito electoral y su propuesta de cabecera distrital.

De igual manera, explicó la vocal del INE, la redistritación se está trabajando por parte de los integrantes de la comisión local de vigilancia, que son los representantes partidistas y se está analizando cómo queda ese proceso.

Rodríguez Sánchez detalló que la redistritación es un modelo matemático donde se toman en cuenta ciertas variables: la primera de ellas la población; la compacidad, es decir, que los distritos electorales estén compactos que no tengan tantas secciones; y mantener la integridad municipal, esto quiere decir no cortar municipios, salvo que sea necesario. Acentuó que en el caso de Quintana Roo, Cancún es la ciudad con mayor población y es donde hay instalados dos distritos federales hasta el día de hoy.

“Estamos trabajando en todas las actividades programadas para que en el mes de diciembre el consejo general apruebe la redistritación correspondiente a Quintana Roo. La finalidad es equilibrar la población, y más allá de ello, cuando se hacen las elecciones que el voto de cada ciudadano tenga el mismo peso, es decir, tenemos distritos electorales con un promedio de alrededor de 400 mil electores, y no que haya un distrito con un millón de votantes y otros distritos con 300 mil, por ejemplo”, sostuvo la funcionaria electoral.

Edición: Ana Ordaz