2022, año de recuperación turística para el Caribe Mexicano: AHRM

La Asociación de Hoteles de la Riviera Maya (AHRM) reconoció que el 2022 fue un año muy bueno en materia turística y espera que la tendencia se mantenga en Quintana Roo para el 2023, a pesar de múltiples desafíos, con la ayuda de campañas de promoción y trabajo unido entre sector empresarial y gobierno.

“En el 2022 se tuvo una reactivación importantísima del sector y seguimos recibiendo reservas a muy largo plazo, incluso para el verano del 2023, algo que no sucedía desde hace mucho tiempo, lo que nos indica la consolidación del Caribe Mexicano como un destino atractivo para visitar en los próximos años”, comentó Toni Chaves, presidente de la AHRM, en rueda de prensa efectuada este miércoles.

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De acuerdo con el organismo hotelero, la Riviera Maya cerró el 2022 con un estimado de un 75.8 por ciento de ocupación, muy por encima del 52.1 por ciento alcanzado en el 2021. El destino registró un buen cierre del año, con un 82.2 por ciento como promedio de demanda de cuartos en el mes de diciembre, pese a algunas cancelaciones de vuelos por motivo de las fuertes nevadas en Estados Unidos.

La AHRM señaló que el crecimiento turístico de la Riviera Maya se demuestra también con la llegada de nuevas inversiones y la apertura de 90 hoteles desde el 2019 a la fecha, al pasar de 428 hoteles con 48 mil 200 habitaciones operando en ese año hasta alcanzar las 518 propiedades hoteleras, con 55 mil 579 cuartos al cierre del 2022, es decir siete mil 379 nuevas habitaciones en los pasados tres años.

Si bien, reconoció que en el 2022 se logró recuperar en casi un 80 por ciento las tarifas, Toni Chaves aseguró que el sector hotelero se ha visto afectado por el incremento en el precio de los insumos diarios y el alza de impuestos, especialmente en agravio de los pequeños centros de alojamiento que no han logrado recuperar por completo el precio de sus habitaciones.

El líder hotelero destacó que entre las prioridades del Caribe Mexicano para este año estará el fortalecer la promoción turística bajo la nueva dirección del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo (CPTQ), labor de la cual estarán muy atentos debido a lo imprescindible que será mantener la imagen del destino a nivel mundial luego de la apertura de casi todos los destinos turísticos luego del cierre que sufrieron por la pandemia.

“En un par de semanas, en Fitur, veremos el pulso de lo que opinan los mercados europeos sobre el destino. Necesitamos estar muy atentos y hacer una promoción concreta y concisa hacia esos importantes emisores de turistas al Caribe Mexicano”, puntualizó.

El presidente de la AHRM señaló que solicitaron a la gobernadora Mara Lezama participar en los diferentes fideicomisos que se crearán para verificar el uso de los recursos captados por el alza de impuestos, como el Impuesto al Hospedaje, que pasó del 3 al 5 por ciento, para que no sólo sirvan para pagar la deuda millonaria del estado, sino que se utilicen para temas prioritarios como la promoción turística, mejorar la seguridad, atender graves problemas sociales y ambientales, como es el recale masivo de sargazo, en donde esta agrupación hotelera es la primera en el Caribe que lidera un proyecto que busca atacar esta problemática con ayuda de instituciones internacionales.

Otro de los retos para este 2023, añadió Toni Chaves, será exigir a las autoridades mejorar la infraestructura vial, como es el acceso a Cancún, concluir la remodelación de la zona conocida como El Trébol (entrada al aeropuerto) debido a la gran cantidad de pasajeros que llegan vía aérea, que en el 2022 sumaron 30 millones, terminar de arreglar la carretera 307 por los dos socavones que se formaron hace tres años y concluir las obras inconclusas del Tren Maya.

“También será necesario poner en orden las rentas vacacionales que afectan no sólo al sector hotelero, sino la recaudación de impuestos al gobierno estatal y los ingresos municipales”, comentó el dirigente hotelero al mismo tiempo que consideró que otro de los retos será seguir aplicando protocolos de sanidad para evitar la reactivación del Covid-19 entre turistas y colaboradores.

A pesar de todos estos desafíos, el dirigente hotelero reiteró que se espera que este sea un buen año para la Riviera Maya y añadió que “no porque las proyecciones sean buenas nos echemos a dormir sino, por el contrario, es cuando más hay que trabajar e invertir, porque es fácil subir, lo difícil es mantenerse”.

 Edición: Estefanía Cardeña