Desde deshidratación hasta la muerte puede causar el calor de no cuidarse: IMSS Cancún

La temporada de calor puede provocar desde deshidratación leve hasta consecuencias más severas como golpe de calor e incluso la muerte, por lo que es de suma importancia tomar medidas preventivas, recomendó José Daniel Sánchez Viveros, urgenciólogo y jefe del Servicio de Urgencias del Hospital General Regional número 17 del Seguro Social en Cancún.

“El golpe de calor es complicado a veces de diagnosticar porque no siempre se presenta de inmediato; el ser humano puede presentar estos síntomas días o incluso una o dos semanas después de la exposición al sol... puede llegar a ser muy grave, puede generar alteraciones neurológicas, confusión, letargo y el problema es que puede causar disfunción en los órganos”, describió.

Actualmente Quintana Roo es uno de los estados donde se siente una ola de calor muy intensa. Tan sólo para este miércoles 14 de junio el pronóstico de la Coordinación Estatal de Protección Civil (Coeproc) fue de temperaturas mínimas de entre 25 a 27 grados Centígrados y máximas de entre 37 a 39 grados, con sensación térmica al mediodía de 46 grados.

De acuerdo con el especialista, habitualmente las personas presentan fiebres muy altas, porque el cuerpo humano va acumulando toda esa energía radial en el cuerpo y eso va alterando la fisiología, pues si bien en el cerebro hay un centro termorregulador que se encarga de controlar la temperatura corporal y genera diferentes mecanismos para mantener una temperatura acorde al cuerpo, la exposición excesiva modifica el termostato, esto sumado a los riesgos por quemaduras cutáneas e incluso complicaciones más severas como el cáncer en la piel.

“Mientras el paciente se mantenga bien hidratado el cuerpo humano tiene capacidad de ir manejando estas cargas de calor, porque la hidratación, la transpiración, la circulación que tenemos en nuestro cuerpo, todo eso va generando ese defecto de radiador, entonces se va compensando, el problema es cuando los pacientes son adultos mayores o pediátricos, sobre todo menores de cinco años, que no tienen la misma capacidad para manejarlo”, especificó.

Por ello, hizo énfasis en que la hidratación se tiene que mantener en todo momento y debe ser con agua natural, porque líquidos azucarados como refrescos, aguas endulzadas, jugos e incluso bebidas con sustitutos de azúcar no son idóneos para hidratar y un parámetro para identificar deshidratación es el color de la orina: entre más clara mejor hidratación se tiene.

También recomendó no exponerse a los rayos del sol en horas pico, que es del mediodía a las tres de la tarde, acudir a la playa por la mañana, cuando la cantidad de radiación es menor, además de no exceder los tiempos de exposición e hidratarse durante todo el tiempo que se esté en la arena.

Incluso hizo mención de los sueros, que si bien se han puesto de moda, tienen ciertas funciones y están enriquecidos con sales y solutos, por lo que son buenos para quienes hacen mucho ejercicio, pero para alguien que no hace actividad de alto rendimiento no es recomendable tomarlos, sino hidratarse constantemente con agua simple, para que el cuerpo tome de ese líquido lo que necesita y lo demás lo deseche.

En los últimos cinco años, informó Sánchez Viveros, en la institución que labora han tenido un aumento de casos de golpes de calor, lo que atribuyó al cambio climático que ha impactado en los aumentos de temperatura, por lo que -reiteró- es fundamental atender la hidratación incluso antes de tener sed.

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Edición: Ana Ordaz