Villanueva hace política desde la cárcel

Joana Maldonado
Foto: José Carlo González / [i]La Jornada[/i] nacional
La Jornada Maya

Chetumal, Quintana Roo
Martes 8 de noviembre, 2016

“La situación del gobierno federal arrastra negativamente al PRI”, consideró el ex gobernador de Quintana Roo, Mario Villanueva Madrid al hacer un balance de la situación que prevalece en el estado, acusando a su homólogo y sucesor, Joaquín Hendricks de querer apropiarse del tricolor.

En un nuevo escrito titulado “¿A dónde va el PRI?”, elaborado desde el reclusorio y que publica en sus redes sociales, el ex mandatario habla “sobre la orfandad del PRI y la sucesión presidencial”, en donde asegura que en Quintana Roo, el partido está descontrolado por no contar con el primer priísta que dictaba una línea.

El tricolor, asegura, perderá la elección federal también por la mala imagen que mantiene el gobierno federal que encabeza Enrique Peña Nieto y que ostenta un 70 por ciento de rechazo ante el electorado, un diez por ciento superior a Ernesto Zedillo, quien generó la alternancia en el gobierno.

Los expertos -cita Villanueva-, evalúan un gobierno federal con problemas para implementar las reformas estructurales, decrecimiento económico, conflicto con el narcotráfico e inseguridad, corrupción, además de que enfrenta a otras fuerzas políticas fortalecidas.

En ese panorama, el PRI, de mantenerse esta situación, ni con el mejor gallo ganaría la elección presidencial”, expresa.

Villanueva Madrid, asegura que Morena de Andrés Manuel López Obrador, “es el enemigo a vencer”, en las elecciones federales.

Acusó: “El ex gobernador Joaquín Hendricks, como secretario técnico del PRI, declaró que Raymundo King estaba muy desgastado y que debería ser relevado. Suena fuera de lugar, como solución por la derrota del PRI. Hendricks enjuició y condenó, dando a entender que él tenía la culpa de haber perdido y que si lo quitaban del cargo se resolvía el problema”.

“Esa solución tan simplista, totalmente errónea y de mala fe, dejó en claro que Hendricks debe tener razones personales y/o de grupo para tumbar del caballo a Raymundo” y apropiarse del partido.

Además aseguró que su predecesor, no es un buen político y que su administración estuvo marcada por el rechazo social, y que incluso su postulación, puso en riesgo la elección de Quintana Roo.

Villanueva Madrid, relata que en sus últimos meses como gobernador, estaba muy preocupado por las acusaciones sobre narcotráfico y ante la negativa del entonces Procurador General de la República, Jorge Madrazo, de dar información sobre su caso, fue ante el Secretario de Gobernación, Francisco Labastida para pedir licencia al cargo y enfrentar los cargos.

“Al otro día me llamó Labastida pidiéndome que fuera a verlo. Ya en su despacho, me dijo que el Presidente (Ernesto Zedillo), me pedía que no renunciara, porque estaba muy preocupado, pues la campaña de Joaquín Hendricks no sólo no levantaba, sino que estaba a punto de perderse y, como sabían que yo tenía control político en el estado, me pedía que me hiciera cargo de la campaña, quedando claro que me darían la información que solicitaba”, precisa.

Asistió a una reunión con el gabinete de seguridad y “las cifras que expusieron eran preocupantes y me comprometí a resolver el problema, pues así evitaría ir a la cárcel. Me dediqué de lleno a la campaña, a convencer a la gente ayudado por líderes, y la elección la ganó el PRI sin mayor problema, dentro de la legalidad”.

Sin embargo Ernesto Zedillo, “tampoco cumplió el compromiso de que se me diera la información sobre las acusaciones, y el Procurador Madrazo cerró la puerta diciéndole al Subsecretario de Gobernación, Jesús Murillo Karam, que mi asunto solo lo trataba con el presidente”.

Acusó a Hendricks Díaz, entre otros, de correr del partido a Carlos Joaquín, “no se fue por su gusto, sino porque la cúpula priista y el gobernador Roberto Borge lo obligaron”.