Mayas desatendidos

Carlos Águila Arreola
Foto tomada del portal [i]Periodismo sin censura[/i]
La Jornada Maya

Cancún, Quintana Roo
Miércoles 2 de noviembre, 2016

Las auditorías que hoy se practican en las dependencias de la administración de Roberto Borge Angulo revelan que el ex gobernador priista y sus colaboradores más cercanos gastaron más en publicidad, que en los tres municipios mayas de Quintana Roo.

Sólo en convenios publicitarios, la Unidad del Vocero de Borge gastó más de 700 millones de pesos anuales en prensa que en obras para la abandonada zona maya, lo que equivale a los presupuestos juntos de los municipios de Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos y Bacalar.

El ex gobernador de Quintana Roo llegó a afirmar que, con 820 hectáreas de cultivo de pitahaya, “Los Chunes vive hoy en condiciones de bienestar y se gesta una cultura empresarial entre sus habitantes. A fin de año se habrán invertido tres millones 150 mil pesos en beneficio de más gente y más comunidades”.

Sin embargo, ese dinero y los supuestos beneficios, como los impuestos que tendrían que pagar las cadenas hoteleras españolas; los mil 980 millones de pesos para promoción turística “extraviados”, o los mil 50 que pagó Aguakán por la prórroga de la concesión de agua potable hasta 2053, que nadie sabe dónde quedaron, nunca llegaron a la zona maya.

Pese a que tiene importantes polos de desarrollo, sobre todo en materia turística, la región maya continúa con importantes rezagos: 77.6 por ciento de los tres municipios donde se asienta mantienen niveles de marginación alta y muy alta, y habita 45.4 por ciento de la población indígena, y 80 por ciento de la población monolingüe.

En julio pasado, tras la derrota del PRI, decenas de mujeres de Los Chunes fueron excluidas del programa Prospera, vital para su subsistencia, por supuestas represalias electorales, de acuerdo con Crescencia Pech Canul, lideresa de la comunidad, quien dijo que se enviaron oficios a la Presidencia y al gobierno de Quintana Roo y a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (Cedhqroo), hasta ahora sin respuesta.

En Los Chunes viven indígenas mayas que se rigen por la ley de usos y costumbres, con una estructura religioso-militar que data de hace más de 500 años, y conservar su autonomía les ha valido menosprecio del gobierno municipal, estatal y federal. Ninguno los contempla en sus planes de desarrollo y tampoco atiende sus problemas.

Acosados por el hambre, la miseria y enfermedades agudas, las comunidades de Chumpón, Chum On, Chun Yah y Chunyaxché, enclavadas en la selva y distribuidas en tierras ejidales, tratan de sobrevivir diariamente hoy esperanzados en que el nuevo gobierno liderado por Carlos Manuel Joaquín González ahora sí los atienda.

En Los Chunes no hay agua potable, ni drenaje ni luz eléctrica.

En septiembre de 2015, el entonces gobernador Roberto Borge fue invitado de honor durante la ceremonia maya para recordar la guerra de castas iniciada por el indígena maya Jacinto Pat en 1847, y en su discurso aseguró que los mayas de la zona no volverían a vivir nunca las condiciones que propiciaron la rebelión.