Cierran carretera 8 horas

Carlos Águila Arreola
La Jornada Maya

Cancún
9 de marzo, 2016

Después de 20 años de engaños y sin servicio médico, alrededor de 500 habitantes de la comunidad de Miguel Hidalgo –a 15 kilómetros al noroeste de la cabecera del municipio de Bacalar (328 kilómetros al sur)– cerraron durante ocho horas la carretera estatal que conecta con la federal Chetumal-Cancún (situada a tres kilómetros del lugar).

La demanda es una: que se asigne un médico titulado y una enfermera al poblado, informó el subdelegado municipal Mario Perera Maza, quien dijo que la población está cansada de promesas: “Primero nos dijeron que para un Centro de Salud teníamos que ser 300 habitantes, luego 600, posteriormente mil y actualmente dos mil 500”.

El bloqueo selló la carretera estatal, que conduce a los antiguos campamentos de ex refugiados guatemaltecos, a 18 kilómetros y medio de Bacalar en ambos sentidos; sin embargo, a los profesores rurales procedentes de Bacalar y la capital se les permitió pasar, pero no llegar a las escuelas; sus vehículos los tuvieron que dejar en el parque.

A Francisco Lara Uscanga, jefe de la Jurisdicción Sanitaria Uno, le sucedió lo mismo al acudir a negociar; sin embargo, el subdelegado Perera Maza le dijo que no tenían nada que hablar con el funcionario, pues desde hace un par de años “nos está engañando”, pues hasta la fecha no ha cumplido con la petición.

La situación se puso tensa ante la nula capacidad de respuesta del funcionario, y se tomó la decisión de no dejar pasar a nadie, aunque algunos burlaron el filtro de seguridad y caminaron 3.5 kilómetros para llegar a la carretera federal Chetumal-Cancún.

El subdelegado señaló que los habitantes de Miguel Hidalgo están cansados de promesas: primero les dijeron que para registrar la Casa de Salud y convertirla en Centro de Salud deberían ser 300 habitantes, luego 600, posteriormente mil y ahora 2 mil 500: “Entendemos que nunca van a cumplir y por eso tomamos la decisión de bloquear”.

Mario Perera señaló que poblaciones con menos habitantes en la zona de Bacalar tienen un Centro de Salud, mientras que en Miguel Hidalgo aún es la Casa de Salud; por lo tanto, el servicio de atención es precario por la falta de doctores; además, el abasto de medicamentos es deficiente.

Son más de 20 años de insistencia por parte de diferentes representantes del ejido, y a la fecha siguen sin alcanzar el registro para su Centro de Salud, cuando ya tienen un censo de que se superan los mil habitantes, en su mayoría niños, jóvenes y adultos mayores.
Recordó que hace un mes se quedaron sin doctora, pues quien brindaba sus servicios era una pasante “que terminó su servicio social y dejó la comunidad”.

Perera Maza señaló que en el caso de las medicinas, “no nos traen directamente porque no tenemos registrado el Centro de Salud, y muy de vez en cuando nos llegan medicamentos, y si no tenemos que quedarnos con lo que sobra de Caanlumil, la comunidad más cercana”.
El subdelegado manifestó que tienen documentos que datan de 1995, cuando por primera vez se solicitó de manera oficial un médico y una enfermera, con título y cédula profesional.

Por su parte, el comisariado ejidal, Roberto Moreno Castellanos, afirmó que se unió a toda la comunidad para la manifestación pacífica, y confirmó que algunas personas entraron y no han podido salir.

“Lo que pedimos al titular de la Sesa es un médico, una enfermera y medicamentos, pues no es posible que la comunidad no tenga el servicio de salud, ya que hay muchas personas enfermas que necesitan atención médica, y ya dos personas han perdido la vida.”

Por su parte, la presidenta del Comité de la Casa de Salud, Dulce Karina Perera Maza, afirmó que no tienen energía eléctrica en el lugar porque no tienen presupuesto para pagar el servicio y, por ende, “mucho menos para la construcción del Centro de Salud”.

En tanto, habitantes de las comunidades de Caanlumil y Maya Balam se comprometieron a apoyar a sus vecinos de Miguel Hidalgo en caso de que no se solucione su demanda porque consideraron que “es sencilla, además de que piden lo justo”.

Los líderes de la comunidad advirtieron que mantendrán los bloqueos, aunque no mencionaron periodicidad para no poner en alerta a los cuerpos de seguridad y sigan siendo en forma sorpresiva.