Hubert Carrera Palí
Foto: Fernando Eloy
La Jornada Maya
Ciudad de México
Miércoles 8 de noviembre, 2017
La Proliferación desmedida de gasolinerías ha convertido a esta capital en una verdadera bomba de tiempo, “como consecuencia de la corrupción e ineptitud operativa del alcalde Edgar Hernández Hernández y su secretario Jesús Quiñones”, denunció Pedro Cámara Castillo, dirigente municipal de Acción Nacional (PAN).
En conferencia, acompañado de síndicos y regidores del PAN, Cámara Castillo denunció actos de soborno y amiguismo para fomentar la apertura de giros negros en diferentes puntos de la ciudad, en los que a cualquier hora se venden cantidades industriales de cerveza y licor.
El regidor Alejandro Brown Gantús mostró, papeles en mano, que Édgar Hernández y su secretario violan flagrantemente la ley al permitir por un lado la instalación de gasolinera a distancias que no permite el reglamento municipal, y por otra la reapertura de giros negros disfrazados de restaurantes familiares.
Uno de los casos más recientes, indicó, es precisamente Los Alpes, que pese a la oposición de decenas de vecinos de la Avenida Alvaro Obregón, antigua salida a Mérida, está a punto de inaugurarse, en franca burla para mucha gente que votó en ese sector a favor del PRI:
Brown Gantús también exhibió un documento que demuestra que cinco de las gasolineras que se han abierto recientemente, una de ellas a unos metros de una gasera, jardín de niños y primaria, han estado involucradas en robo de combustible.
A pregunta expresa, el dirigente municipal del PAN descartó que esta sea una estrategia de la familia Mouriño para evitar se les caiga el millonario negocio que significa la venta de combustible a través del Grupo Energético del Sureste (GES) y aseguró que además que la familia del malogrado secretario de Gobernación durante el sexenio de Felipe Calderón Hinojosa “ya se ha distanciado del partido.
“No estamos en contra de la apertura de más gasolineras, pero con respeto a la ley y no como lo están el alcalde y su secretario, con la finalidad de llenarse los bolsillos y favorecer a amigos y familiares”.
El alcalde Edgar Hernández, añadió, “está replicando lo que hizo durante su mandato quien lo puso en la política, el mal recordado gobernador Fernando Ortega Bernés”.
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La Jornada Maya
