Útiles escolares, entre el reciclaje y el gasto

En este regreso a clases los padres de familia se han enfrentado a la difícil tarea de comprar todo lo necesario para sus pequeños, desde los uniformes hasta los útiles, y si bien las listas que entregan en los centros educativos suelen ser estrictas, en este retorno hubo mayor facilidad para evitar grandes gastos, ya que la Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ) emitió hace poco un comunicado para que en cada escuela se tenga flexibilidad respecto al material de trabajo de los menores en todos los niveles educativos y no exijan artículos que condicionen el buen desempeño de los estudiantes. 

Lo mismo aplica para los uniformes escolares, que no serán obligatorios. Por ello han surgido diversos grupos en redes sociales para intercambio o venta a precios accesibles de uniformes y útiles escolares, aunque también están los padres de familia que hasta horas antes del retorno a las aulas buscan las mejores ofertas en diferentes papelerías, supermercados o espacios de venta al mayoreo. Así, en Quintana Roo este regreso a clases tiene la particularidad del fomento al reciclaje y al rehúso no sólo de útiles, sino también de las prendas que usan los estudiantes.

“Se emitió un comunicado de la subsecretaría de Educación básica para que no sea condicionante ni el uniforme, ni el tema de los útiles escolares, en razón de que tenga que ser el listado preciso… se trata inclusive de reciclar, en cuanto a libretas, en cuanto a reglas, plumas, lo que tengan los alumnos que lo vayan llevando”, recomendó hace una semana Carlos Gorocica Moreno, subsecretario de la SEQ en la zona norte de Quintana Roo. 

Sin embargo, hay padres de familia que han ahorrado o tienen recursos suficientes para hacer un gasto mayor y en esta época optan por adquirir incluso algunos útiles más caros de los habituales. Muchos de ellos pudieron verse este fin de semana en los diferentes centros comerciales del estado haciendo aún compras para sus hijos, quienes en muchos casos les acompañaban.

De acuerdo con la estimaciones de la Asociación de Padres de Familia, el gasto es de hasta 2 mil 500 pesos por alumno, aunque con la facilidad de llevar artículos reciclados como cuadernos que no se terminaron el ciclo pasado algunos papás aseguraron que han podido ahorrar y gastar solamente 500 pesos, pero a esto se le tiene que sumar el uniforme y los zapatos.

“Ya hicimos nuestra limpieza y como todavía tuvieron muchas clases en línea el grado pasado, pudimos ahorrarnos mucho en libretas y colores, pero los zapatos y el uniforme pues ya no les quedan, entonces aunque queramos reciclar ya no se puede”, relató Verónica Ledesma, madre de una pequeña que pasó a quinto grado de primaria y un niño que iniciará su segundo año de secundaria.

Aunque también compartieron que ya en Facebook han surgido grupos para intercambio y venta de uniformes de segunda mano o incluso grupos de mamás o emprendedoras que comparten los uniformes que tienen en buen estado y que le pueden servir a alguien más.

“La verdad sí nos conviene, porque algunas mamis con tal de sacar unos pesitos venden sus uniformes usados hasta en 100 pesos, eso les ayuda a ellas a comprar lo que necesitan sus hijos y a nosotros a ahorrar y no tener que comprar algo nuevo, casi siempre está en buen estado todo lo que se vende por esos grupos”, agregó Antonio Fernández, padre de un menor que pasó a primero de secundaria.

Edición: Emilio Gómez