En el Caribe Mexicano hay una gran necesidad de crear y desarrollar espacios comerciales para satisfacer las necesidades que demandan quienes viven y visitan el destino, destacó Enrique Domínguez, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) Playa del Carmen.
“Debido a la gran demanda turística y necesidad de vivienda, en muchas ocasiones pasamos por alto el tema de espacios comerciales y centros de consumo en Quintana Roo, siendo este un inmejorable momento para la inversión inmobiliaria en este ramo de la industrial, lo que nos permite generar proyectos patrimoniales más estables que la vivienda de renta”, destacó el especialista inmobiliario.
Detalló que actualmente existe la oportunidad para impulsar nuevos formatos comerciales y como caso de éxito mencionó la Quinta avenida, que inició como un paseo peatonal turístico con espacios para comerciantes locales que vendían productos artesanales y hoy está convertida en la columna vertebral de Playa del Carmen, creando oportunidades comerciales y de gastronomía, donde se han establecido marcas internacionales y plazas comerciales que buscan brindar una experiencia al consumidor que va más allá de la compra de un producto.
“Playa del Carmen se ha convertido en punta de lanza debido al crecimiento de este paseo peatonal, el cual seguirá creciendo y actualizando su oferta comercial, a la que se suman corredores gastronómicos con la magia única que distingue al destino. Cancún, por su parte, se consolida como el destino que ha logrado una permanencia y una actualización urbanística gracias a su correcta planeación, integrando Puerto Cancún, donde se logra consolidar un plan maestro integral que alberga componentes como es vivienda, comercio, oficinas, deportes y marina, lo que permite contar en el estado con comunidades planeadas”, señaló Enrique Domínguez.
Los inmobiliarios catalogan la oferta comercial en Riviera Maya en comercial turística, comercial regional o de distrito, espacios de oficinas y centros de hospedaje gestionados de forma digital. Cada uno de ellos tiene una dinámica específica, lo que ha permitido este crecimiento constante en cada, sumando a la nueva realidad de que el 2020 marcó al destino como uno de los favoritos para establecerse, y ser un imán para los nómadas digitales que demanda espacios flexibles para vivir y laborar de forma remota.
Las nuevas tendencias de espacios comerciales en la región -dijo- han estado enfocadas a realzar el patrimonio cultural de México de forma inmersiva para con el principal objetivo de impulsar una mayor inversión para crear infraestructura para el turismo. Las tendencias para el 2023 en el Caribe Mexicano serán desarrollos de proyectos de usos mixtos, espacios flexibles y colaborativos de trabajo, enfocados en los nómadas digitales, espacios comerciales inmersivos donde la experiencia al usuario será el eje con un enfoque al bienestar y la salud.
“Asimismo, veremos la incorporación de tecnología en los espacios físicos con los usuarios, aplicando el real estate as a service y la incorporación de espacios peatonales y micromovilidad en los distritos comerciales, con el fin de lograr ciudades de 15 minutos en sus tiempos de traslado”, mencionó el directivo de AMPI.
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