Raxalaj Mayab

Foto y texto: Carlos Águila Arreola
La Jornada Maya

Cancún
Sábado 23 de Julio, 2016

Un prototipo del Instituto Memnosyne de Dallas, Texas, se desarrolla en el Centro Comunitario de Arte y Filosofía Maya “Raxalaj Mayab”, en el municipio de Felipe Carrillo Puerto (230 kilómetros al sur), y se espera sea inaugurado a principios de 2017, de acuerdo con Tania Rodríguez Rodríguez, responsable del plan arquitectónico.

Se trata de School out of a box (Escuela afuera de una caja), que incluye tecnologías verdes y aprovecha los recursos y técnicas prehispánicas de construcción propias de la región, como el uso del chukum, resina que se extrae de la corteza del árbol del mismo nombre, además de paneles y baterías solares.

Desarrollar arquitectura ecológica y sustentable alrededor del planeta y crear centros de desarrollo educativo y social, son los principales objetivos del proyecto, supervisado por la responsable del modelo e integrante del Instituto Memnosyne.

Tania Rodríguez explicó que el prototipo hace alusión a una escuela dentro de un contenedor y que va a ser enviada a diferentes zonas y comunidades alrededor del mundo: “El instituto ya tiene contemplado Nueva Zelanda, con la etnia polinesia de los maoríes”.

La arquitecta detalló que el diseño ofrece la posibilidad de adaptarse a diferentes zonas porque cuenta con un plan autosustentable para el uso de materiales orgánicos, que aprovechan los recursos y técnicas de construcción de la región.

Como ejemplo puso la incorporación de algunos detalles y técnicas prehispánicas como el uso del chukum, una resina que se extrae de la corteza de un árbol y que se utiliza en el primer prototipo del proyecto en Raxalaj.

También se incluye la construcción de muros de 30 centímetros de grosor que permitirá la estabilización de la temperatura en las aulas; y de una cúpula que permitirá el flujo de aire; un techo verde, y ventanas que mantienen la intención del exterior con el interior.

El proyecto School out of a box tiene soluciones universales aplicables a otros países y regiones como paneles solares, energía eficiente mediante leds, captación pluvial, muebles adaptables y multiusos para cualquier circunstancia.

Tania Rodríguez hace énfasis en ofrecer a las comunidades en la que se instalarán esas escuelas, no sólo un espacio por sí mismo para estudiar, sino un espacio con un diseño que resulte agradable y que permita un vínculo con el medio ambiente.

“No se trata de poner sólo un búnker, sino de tener toda una zona orgánica y agradable porque somos una nación megadiversa que tiene una comunión con el medio ambiente desde nuestra base: que la gente vaya y tome clases, pero que no se sienta excluida del medio”, explicó la arquitecta.

“Mi misión es poner la dignificación de los espacios, hacer una comunión como la que se tenía antes con la tierra, y tener un estilo de vida que incluya el medio ambiente y, sobre todo, respetar toda expresión de vida.”

Los criterios para definir las sedes donde se implementará el proyecto dependerá del tipo de inversión que se desarrolle en este proceso, “se necesita una inversión de impacto y que las empresas o inversionistas se sensibilicen y colaboren con el proyecto”, refirió.

Tania expresó su deseo porque más centros de esa especie se establezcan en México, e invitó a las empresas e inversionistas a apostar por el proyecto, que promete cambiar la vida de muchas personas ofreciendo empleo, y una mejor educación.