Más en juego que el deporte

Daniela Tarhuni
Foto: Comunicación Río 2016
La Jornada Maya

Viernes 5 de agosto, 2016

Con una presidente alejada de su cargo por presuntas ilegalidades en las cuentas públicas, una crisis económica que amenaza con colapsar servicios esenciales; alertas por el virus del Zika que condujeron a que un centenar de científicos solicitaran que se cambiara la sede o pospusieran los juegos; la detección de una súper bacteria resistente a fármacos en aguas donde habrá competencias y el ocultamiento de la marginación y pobreza de las favelas con coloridos carteles, mañana comienzan los XXXI Juegos Olímpicos. Y hay mucho más en juego que el deporte mismo.

[b]La sombra de la guerra[/b]

Por primera vez habrá una delegación de diez atletas refugiados, provenientes de Siria, Sudán, Etiopía y el Congo, en representación de los 21.6 millones de refugiados en el mundo. Hoy están en Brasil para competir y buscar nuevas oportunidades, como la abanderada de la delegación, la nadadora siria de 18 años Yusra Mardini, quien realizó la carrera de su vida el año pasado al arrastrar, durante tres horas en el Mar Egeo, el maltrecho bote en el que iban 20 refugiados hasta la isla de Lesbos.

[b]Y del dopaje[/b]

Un centenar de deportistas rusos fueron excluidos de los juegos, tras revelarse un sistema de dopaje orquestado por el gobierno ruso desde 2011. Y aunque este hecho tiene que ver más con política, lo cierto es que la ciencia tendrá que ofrecer nuevos y avanzados métodos de detección de sustancias prohibidas. Todas las miradas estarán sobre el Laboratorio de Río, que logró su reacreditación apenas en julio pasado, al cumplir los requerimientos de la Agencia Mundial Antidopaje.

[b]Tecnología deportiva[/b]

Veremos nuevas aplicaciones nanotecnológicas en ropa, calzado y equipos que mejoren aspectos como resistencia, rigidez, durabilidad y peso para lograr un alto desempeño. Los sistemas electrónicos tendrán mayor precisión en el puntaje, como en el Taekwondo, en el que cada patada que de en el blanco será retransmitida por wi-fi a los jueces; las competiciones de 800 y 1500 metros libres tendrán contadores digitales que actualizan el número de vueltas que llevan los nadadores; en tiro al blanco, se alcanzará una precisión de 0.2 milímetros para detectar dónde ha dado la flecha y los GPS acoplados a los botes, arrojarán datos en tiempo real de la velocidad y dirección que llevarán los competidores de canotaje.

[b]El salto tecnológico[/b]

Cada cuatro años escuchamos la frase “Serán los Juegos Olímpicos más vistos de la historia”, lo cierto es que ahora habrá un cambio significativo debido al uso de nuevas tecnologías. Eso será notable en nuestro país, donde por vez primera Televisa y Tv Azteca quedaron fuera de las transmisiones, luego de que Carlos Slim comprara los derechos de transmisión. Si bien los canales 11 y 22, así como Claro Sports, ESPN y Fox, harán su parte, se prevé el incremento de las audiencias por Internet.

[b]¡México y la península de Yucatán![/b]

Nuestra delegación está compuesta por 126 deportistas, de los cuales, nueve son de la península de Yucatán. Según las previsiones del Comité Olímpico Mexicano la delegación quedará entre los lugares 30 y 40 del medallero.

Para consuelo y efectos prácticos, los campeones olímpicos de Río no recibirán medallas de oro puro. Éstas dejaron de entregarse tras los juegos de Estocolmo en 1912. El primer lugar recibirá una medalla de plata con una cobertura de oro; el segundo, una aleación de plata y cobre, mientras que las medallas de bronce, serán de cobre. No todo lo que brilla es oro.

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