Presentan libro que muestra "un Yucatán que ya no existe"

Katia Rejón
Foto: Facebook @fototeca.guerra
La Jornada Maya

Mérida, Yucatán
Viernes 2 de febrero, 2018

La memoria histórica de Yucatán que resguardan los 500 mil negativos de la Fototeca Pedro Guerra es condensada en el libro [i]Fotografía Artística Guerra[/i], editado por José Antonio Rodríguez y Alberto Tovalín Ahumada en el marco del 40 aniversario del estudio de fotografía más importante del sureste, que retrató a los yucatecos desde finales del siglo XIX hasta los años cuarenta del siglo XX.

Detrás de las fotografías está el talento de Pedro Guerra Jordán y Pedro Guerra Aguilar, padre e hijo, sin embargo todas están firmadas bajo el nombre del estudio fotográfico. “Hay una parte de principios del siglo XX donde es muy difícil saber de quién es cada foto. Ellos trabajaban juntos, sin embargo, la importancia radica en tener un volumen de lo que ambos realizaron por más de 50 años. Un registro histórico de un Yucatán que ya no existe”, comenta en entrevista Alberto Tovalín.

El libro obtuvo el patrocinio de la LXIII Legislatura de la Cámara de Diputados, en especial del diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, quien escribe la presentación del compilado. La idea de realizar este libro surgió hace 10 años en una plática entre Tovalín Ahumada y Jimmy Montañez, quien fue coordinador del acervo fotográfico adquirido por la Universidad Autónoma de Yucatán en 1977, sobre hacer un libro con un equipo multidisciplinario. Esto aunado al interés de los editores José Antonio Rodríguez y Tovalín Ahumada por rescatar los archivos de grandes fotógrafos locales de las ciudades grandes del país.

Las más de 200 imágenes están divididas por capítulos: el primero es el “Estudio Fotográfico”, donde aparecen retratos; “Cotidiano”, en donde se ven los bares, trabajadores, el carnaval y la vida de la ciudad; un ensayo sobre la industria del Henequén; el capítulo “Vestigios”, sobre sitios arqueológicos; “Rituales”, donde se relata los ritos funerarios; y finalmente la “Política”, donde hay imágenes como el Primer Encuentro Feminista en Mérida, de Felipe Carrillo Puerto y de Pino Suárez.

También hay una sección de ensayos sobre los temas anteriores, donde colaboran académicos de la UADY, de la UNAM y el INAH, como María de la Luz Medina Chávez, Blanca González Rodríguez, Arturo Ávila Cano, Isabel García Franco, Marisol Domínguez González, Lilia Fernández Souza, José Antonio Rodríguez, Jesse Lerner y Edward Montañez.

Para hacer la curaduría de las fotos, según explica Tovalín, fue necesario conocer todo el archivo, al menos el digitalizado, y ver cuáles eran los temas más recurrentes de acuerdo con la importancia que le habían dado los fotógrafos.

Por su parte, la maestra Blanca González opina que la fototeca es “un tesoro que tenemos en Yucatán, y el que esté en manos de la UADY lo hace mucho más accesible a investigadores y al público en general, pues retrata una época muy larga y el acervo no se disgregó ya que la familia lo conservó hasta dárselo a la universidad”.

Acerca de su percepción de la vida yucateca a partir de las imágenes de Pedro Guerra, Tovalín contesta que “nosotros entendemos quiénes somos cuando sabemos de dónde vinimos. De ahí que recuperar ese pasado histórico a través de la imagen sea importante para concebir el mundo que habitamos”.

Los coeditores de Fotografía Artística Guerra, José Antonio Rodríguez y Alberto Tovalín, han sido reconocidos anteriormente con el Premio al Mejor Libro de Arte editado en México otorgado por la Cámara Nacional de la Industria Mexicana (Caniem) en los años 2016 y 2017 con las publicaciones [i]Nacho López, fotógrafo de México[/i] en coedición con el Instituto Nacional de Bellas Artes y el Museo del Palacio de Bellas Artes, y más recientemente por [i]Héctor Xavier. El trazo de la línea y los silencios[/i] por la Universidad Veracruzana y el Instituto Veracruzano de la Cultura.

“Son honrosos estos reconocimientos. El jurado nos dijo que nuestro libro ‘tenía más corazón’, y era un libro en pequeño formato. El concepto del libro ha ido cambiando mucho, antes se hacían producciones muy costosas y hoy en día se están utilizando todas las opciones de mercado. El libro de Pedro Guerra, por ejemplo, está impreso mitad en couché y mitad en bond”, comenta.

El editor invita a la gente a acercarse a este álbum de la memoria para valorar el aporte de las imágenes por sí mismas. “Las últimas imágenes son de los años cuarenta y la misma ciudad ha cambiado mucho, se puede conocer la historia a través de las imágenes de Guerra”, concluye.