Reuters
Foto: Xinhua
La Jornada Maya
Londres, Inglaterra
Martes 24 de marzo, 2020
A medida que aumentan las muertes por coronavirus en Gran Bretaña, un grupo de voluntarios de Londres ha establecido un servicio de entrega de alimentos para proporcionar comidas gratuitas a enfermeras en apuros en un importante hospital público que lucha contra la pandemia del COVID-19.
El grupo, llamado Critical NHS, obtiene alimentos de empresas locales y los entrega tres veces al día a enfermeras y otros empleados médicos de primera línea en el Hospital St George's en el sur de la capital inglesa.
Muchos británicos dependen en gran medida del Servicio Nacional de Salud (NHS) y de la atención gratuita que brinda. Pero el primer ministro británico, Boris Johnson, advirtió el domingo que el NHS podría quedar "sobrepasado" por el coronavirus en solo dos semanas.
Hasta el domingo, 281 personas con COVID-19 habían muerto en el Reino Unido. El gobierno dijo que hay cinco mil 683 casos confirmados y que Londres es la ciudad más afectada.
Critical NHS, el grupo de voluntarios, fue establecido el jueves por los esposos Niall Barrett y Janneke Diemel, quienes respondieron a los llamados de la jefa de enfermería St George's a que las personas "donen una caja de galletas o algo para que los trabajadores puedan comer".
"Nuestra primera entrega fue de 20 pizzas", dijo Barrett.
"A las enfermeras les encantó eso, estaban muy agradecidas. Y luego la iniciativa siguió creciendo y creciendo".
A Barrett y Diemel, que dirigen una compañía de viajes de golf, se les unieron rápidamente dos entrenadores de medio tiempo del Battersea Ironsides, un club de rugby local. Otros residentes del sector han ofrecido conducir, donar dinero y manejar la cuenta de Twitter.
Una cuenta de crowdfunding creada en PayPal recaudó 22 mil libras (25 mil 500 dólares) en solo cuatro días.
Barrett dijo que muchas enfermeras estaban demasiado ocupadas para comprar alimentos o se encontraron con que sus lugares habituales para comer habían cerrado.
Los pubs y restaurantes locales donan comidas o las venden a bajo precio. Luego, los voluntarios de Critical NHS entregan estos alimentos a la unidad de cuidados intensivos generales del hospital, donde se distribuyen a las enfermeras, el equipo de ambulancias, los conserjes y otros empleados.
Al comprar la comida localmente, el grupo espera ayudar a las pequeñas empresas afectadas a mantenerse a flote.
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