Tommy Paul recibió mucha menos atención que su rival, más joven y con menos experiencia, Ben Shelton, antes del duelo que enfrentó a los estadunidenses en los cuartos de final del Abierto de Australia.
Tal vez fue producto de la fascinación que despierta el desconocido Shelton: con apenas 20 años y menos de un año después de ganar un campeonato universitario en Florida, viajaba por primera vez al extranjero para participar en su segundo torneo del “Grand Slam”.
Así que los gritos de aliento que más se escucharon en la arena Rod Laver el miércoles, bajo un sol que elevó la temperatura a 30 grados centígrados, eran para Shelton. Pero la historia de Paul, que es la que continuará en Melbourne Park, es también bastante buena. El tenista de 25 años y natural de Nueva Jersey fue una estrella en categoría juvenil y ahora está cumpliendo las expectativas como profesional. Con su victoria de 7-6 (6), 6-3, 5-7, 6-4 ante Shelton alcanzó su primera semifinal de un “major” en su 14a. participación.
Su próximo rival será Novak Djokovic, ganador de 22 “grand slams”, nueve de ellos en Australia. El serbio arrolló al ruso Andrey Rublev (5), 6-1, 6-2, 6-4.
Asimismo, dos días después de avanzar por primera vez a los cuartos de final de un grande, Magda Linette logró dar un paso adicional al clasificar a semifinales.
Linette, quien no figuraba entre las preclasificadas y tiene 30 años, doblegó 6-3 y 7-5 a Karolina Pliskova, otrora número uno del mundo.
Edición: Ana Ordaz
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La Jornada
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