Brasil y Alemania brillaron en el mundial de futbol femenil.
La magistral definición de Bia Zaneratto posiblemente acabe como el mejor gol de esta copa. Y por lo visto en la paliza de 4-0 que le propinaron ayer a Panamá, las brasileñas confirmaron sus pretensiones de conquistar el título.
Ary Borges firmó una tripleta en su debut en un mundial, pero su asistencia para el gol de Zaneratto en el segundo tiempo fue la nota más destacada del partido en Adelaida, fácilmente lo mejor del torneo hasta ahora.
Cuando el centro de Debinha quedó a los pies de Borges, tras una excelente circulación del balón, la delantera -autora de dos goles en la primera parte-, parecía perfilada para el tercero. Pero miró a su alrededor, desairó a una defensora panameña que quedó desparramada y cedió de taquito a Zaneratto, quien clavó el balón en el ángulo superior.
Fue el “jogo bonito” brasileño en todo su esplendor.
Inmediatamente después de que Alemania vapuleó 6-0 a Marruecos, las dirigidas por Pia Sundhage dejaron en claro que vienen con la intención de coronarse campeonas mundiales por primera vez. “El primer partido siempre es difícil. Hicimos cuatro goles y jugamos a un gran nivel por ciertos pasajes”, destacó la sueca Sundhage.
Alexandra Popp anotó dos veces en la primera mitad y Alemania añadió otros cuatro tantos en la segunda parte frente a Marruecos.
Fue un duelo entre las bicampeonas del mundo y un equipo que se estrenaba en el torneo.
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Edición: Fernando Sierra
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