El Ejército mexicano ha hostigado al menos dos veces a la viuda y madre de José Jacob Rodríguez González, joven víctima de ejecución extrajudicial el pasado 10 de marzo en el centro de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
El 26 de abril, cerca del mediodía, María Elena González Ruiz y su suegra Paulina González Torres fueron retenidas y amenazadas por personal militar en el cruce de las calles César López de Lara y Perú, al salir de una consulta en el hospital de especialidades.
El 12 de mayo, a solicitud de las dos mujeres, funcionarios de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos solicitaron a directivos de la Secretaría de la Defensa Nacional –quienes las aceptaron– medidas cautelares; sin embargo, la tarde del miércoles 9 de junio, aproximadamente a las 17 horas, unos 50 militares, a bordo de seis unidades del Ejército mexicano, llegaron al domicilio de la viuda de José Jacob, con ocho meses de embarazo, en la colonia Santiago N. Belden, y le impidieron salir.
Los militares se retiraron cuando llegaron visitadores de la organización no gubernamental Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.
Edición: Emilio Gómez
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