Tras varias semanas esperando la liberación de Juanita Alonzo Santizo, una migrante maya guatemalteca detenida en Reynosa, Tamaulipas, familiares se unieron a la Caravana de Madres de Migrantes Desaparecidos Nunca Nos Hemos Ido para presionar a las autoridades mexicanas.
Juanita Alonzo salió de su comunidad en 2014 con la finalidad de buscar trabajo en Estados Unidos, pero durante su paso por México fue detenida y se le negó un traductor.
La mujer de origen indígena maya chuj fue víctima de tortura y discrimanción, denuncia la organización Promotores de la Liberación Migrante, que informó que desde septiembre de 2021, el Grupo de Trabajo de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas determinó que la privación de libertad de Juanita fue arbitraria y pidió al Gobierno de México su liberación dentro de los seis meses posteriores.
“El plazo de seis meses terminó el 8 de Marzo 2022 y el gobierno de México todavía no cumple con su obligación de responder a la decisión de las Naciones Unidas”, reclamó la organización.
Por ello, familiares se sumarán a la caravana de madres que buscan a sus hijos migrantes que fueron detenidos o desaparecidos en México durante su trayecto hacia Estados Unidos.
“Toda nuestra familia espera que Juanita salga de la cárcel sana y salva. Esperamos que se haga justicia. Juanita es totalmente inocente y nada más la condenan por ser nacida en un pueblo indígena”, comentó Pedro Alonzo García, tío de Juanita.
La caravana actualmente avanza en el estado de Veracruz y su destino es la Ciudad de México, donde el 10 de mayo, Día de las Madres, se unirán a las protestas de otras víctimas.
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Rulo Zetaka
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La Jornada Maya
