Después de un mes, accede por su familia

Matilde Pérez U.
Foto: Pablo Ramos
La Jornada

México, DF
4 de junio, 2015

Nestora Salgado, comandante de la policía comunitaria en Olinalá, Guerrero, aceptó levantar la huelga de hambre que sostuvo desde hace casi un mes, tras la petición de su familia y la promesa del gobernador de Guerrero, Rogelio Ortega, de que sus compañeros de la CRAC, Arturo Campos y Gonzalo Medina, sean trasladados del penal del estado de México a Guerrero.

En el mitin que llevaron a cabo integrantes de diversas agrupaciones sociales en la explanada del Centro Femenil de Readaptación Social Tepepan, en el sur de la ciudad, para demandar la libertad de Nestora, la hija menor de la comandante de la CRAC en Olinalá, Grisel Rodríguez Salgado, informó que esta mañana en la visita familiar acordó levantar la huelga de hambre que mantuvo durante 25 días y los últimos cuatro sin tomar líquidos.

"Está débil, pero con mucho ánimo. Condicionó levantar el ayuno al traslado de sus dos compañeros de la CRAC al penal de Guerrero, si ello no se lleva a cabo, retomará su protesta", acotó.

Durante el trayecto al penal, la escritora Elena Poniatowska se sumó a la exigencia de libertad de Salgado. "Las cosas están tan mal en el país, que las autoridades castigan y persiguen a los luchadores sociales", dijo. Por unos minutos, la escritora y colaboradora de este diario, levantó una pancarta en la que se leía: "libertad a Nestora". También la acompañaron Jesusa Rodríguez.

En la explanada frente al penal, los integrantes de agrupaciones como el CECOP, Inteligencia Ciudadana Mexicana y organizaciones civiles de migrantes destacaron que no cesarán sus manifestaciones hasta lograr que se libere a Salgado y a otros presos políticos. "Este no es un caso jurídico sino político", acotaron.

Giovani, sobrino de la comandante, agradeció el apoyo de las agrupaciones sociales y asentó que por su activismo se logró el traslado de Nestora al penal de Tepepan.

La hija menor de la comandante de la policía comunitaria comentó que fue durante la mañana que el gobernador de Guerrero visitó a su madre, pero dijo desconocer qué hablaron