La historia que cimbró un gobierno

Blanche Petrich
Foto: Afp
La Jornada Maya

Ciudad de México
Jueves 21 de julio, 2016

Cuatro días después de que el presidente Enrique Peña Nieto pidiera perdón por “el error” de la adquisición de una mansión de 700 millones de dólares, conocida como Casa Blanca, la periodista Carmen Aristegui, su equipo de reporteros de investigación y los directivos de la influyente editorial Penguin Random House denunciaron esta mañana que el dueño de la concesionaria radial MVS, Joaquín Vargas los ha demandado por daño moral”, por las expresiones vertidas por su ex conductora en el prologo del libro La Casa Blanca de Peña Nieto, la historia que cimbró un gobierno.

Esta demanda interpuesta por Vargas les fue notificada, tanto a Aristegui como a la editorial el pasado 29 de mayo y depositada en el juzgado 57 de lo civil en el Distrito Federal. A la periodista se le acusa de haber lastimado el prestigio y buen nombre del empresario en este prólogo en el que sostiene: “personalmente lamento el derrumbe moral de Joaquín Vargas y el de sus hermanos” y califica de “acciones de censura y aniquilamiento” la persecución judicial que a partir de entonces se prosigue en su contra en diversos tribunales, incluso federales.

Esta última demanda “puede tener efectos devastadores” para el patrimonio de la periodista, aclaró el abogado Javier Quijano, también presente en la reunión de prensa donde se expuso el caso, ya que la Suprema Corte de Justicia eliminó el tope de la sanción monetaria que puede aplicarse en estos litigios. “Es muy riesgoso para ella” expresó el defensor.

Explicó también que Joaquín Vargas diferenció “cuidadosamente” su demanda a la trasnacional editorial. A Random House “solamente” se le exige retirar el libro lanzado en octubre del año pasado de la circulación y eliminar el prólogo de Aristegui, antes de volverlo a publicar y ponerlo en venta.

Los cuatro autores del libro, los reporteros Daniel Lizárraga, Rafael Cabrera, Irving Huerta y Sebastián Barragán, también presentes, aseguraron que la pretensión de Vargas, a la que calificaron de “quema de libros”, lastima la integridad y la unidad de esta obra periodística. “No permitiremos su publicación sin esa parte indispensable”.

De inmediato, el director general de Penguin Random House, Ricardo Cayuela, terció: “nosotros tampoco”.

El editor aclaró que aunque la editorial, una trasnacional que domina el mercado de libros en el mundo entero, precisó que “nunca antes la Random había enfrentado una demanda de este tipo y en estas condiciones. Vargas pretende dividir a la editorial de sus autores. Haber publicado este libro sin un prólogo de Aristegui hubiera sido impensable para nosotros, incluso hubiera sido una falla editorial no tenerlo. No aceptaremos ninguna demanda que tenga una dedicatoria en contra de una figura de liderazgo político inobjetable, como lo es Carmen Aristegui”.

Al final de la rueda de prensa se proyectó un breve mensaje videograbado de Carmen Aristegui en el que la periodista le pregunta a Enrique Peña Nieto “¿De qué perdón estamos hablando, señor presidente?”.