¿PAN con lo mismo?

Felipe Escalante Tió
Gráfica: Encuesta Massive Caller
La Jornada Maya

Miércoles 21 de marzo, 2018

El bipartidismo a la yucateca se rompió, concluyeron Fabrizio León y José Luis Preciado en la carpa de [i]La Jornada Maya[/i], en la Feria Internacional de la Lectura Yucatán 2018, por la incorporación de Joaquín Díaz Mena, [i]Huacho[/i], como candidato de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) a la gubernatura del estado.

Rápidamente, en su encuesta del 17 de marzo, Massive Caller colocó a Díaz Mena con un 13.1 por ciento de intención de voto, mientras que quienes manifestaron que pretenden dar su apoyo a Mauricio Sahuí Rivero, candidato del PRI, son el 33.3 por ciento de la muestra, que son todavía 10.3 por ciento menos que los que optarían por Mauricio Vila, del PAN.

En su encuesta anterior, Massive Caller ponía como indecisos a 18.45 por ciento de su muestra, junto con un 5.25 por ciento que se manifestaron por Sofía Castro. Estos números quedaron esta vez en un 9.7 por ciento de la muestra, de lo que hace una semana era casi la cuarta parte de los encuestados, por lo que podría pensarse que, sin hacer campaña, las posiciones están prácticamente definidas, pues los indecisos van haciéndose cada vez menos.

La intención de voto hacia Morena, según indica esta reciente medición, disminuyó unas centésimas porcentuales, cuando pudiera pensarse lo contrario por la cuestión del quiebre del bipartidismo tradicional yucateco. Obviamente hay que destacar la muestra, que es de apenas 600 personas que además se someten voluntariamente a la encuesta a través de una aplicación para teléfonos celulares, pero también es porque no se ha visto nada distinto entre los candidatos, por la consabida cantaleta de “aún no es tiempo” o “la ley no nos permite hacer propuestas en este momento”.

Más allá de los partidos que los respaldan, no hay, hasta ahora, muchos elementos para distinguir las principales propuestas de los hoy candidatos. Partimos de plataformas vacías. En la dinámica bipartidista de las precampañas tuvimos, palabras más palabras menos, “Yucatán debe continuar por la ruta trazada por la administración de Rolando Zapata” y “Yucatán merece más”, que este último puede traducirse como más administración.

Cuando en una dinámica dialéctica, que es como pretenden verse PRI y PAN en Yucatán, como diametralmente opuestos, la irrupción de un tercero no sólo es descalificada de inmediato, con tal de no romper el equilibrio de dos fuerzas, sino que este tercero tiene sus propias debilidades, producto del sistema en el cual surgió.

Dicho de otra forma, ya estamos viendo cómo a Díaz Mena ya se le llama “traidor” e “ingrato” al PAN, o que el PRI está detrás de su postulación e incluso en un portal se acusa sin prueba alguna que la innombrable ex gobernadora Ivonne Ortega Pacheco lo tiene como segundo candidato y le entregó 30 millones de pesos. El argumento va contra su persona, para colocarlo como tonto útil.

En efecto, [i]Huacho[/i], como yucateco, está formado políticamente por el bipartidismo, de manera que para en efecto romper el bipartidismo, deberá utilizar una estrategia de campaña distinta a las tradicionales, pero sobre todo con un fondo que abone a la construcción de un cambio de mentalidades. Decir que no es “ni de izquierda ni de derecha” y que seguirá siendo el mismo [i]Huacho[/i] es plantear que su proyecto es el de una fracción, un grupo, del panismo a la yucateca, ni siquiera barnizado por el partido que hoy le da cobijo. En consecuencia, la intención de voto por Morena puede estar rebasando el máximo histórico del Partido de la Revolución Democrática en Yucatán, pero esto no es romper el bipartidismo. Por el contrario, se trata de que exista una tercera opción real con una plataforma distinta a las existentes.

Por lo pronto, las campañas están por arrancar y entonces veremos si de verdad se rompe el bipartidismo, o tendremos PAN con lo mismo.

[i]Mérida, Yucatán[/i]
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