Vila, el reto azul

Rubén Torres Martínez/Francisco J. Hernández y Puente
Foto: Facebook @huachodiazmena
La Jornada Maya

Jueves 15 de marzo, 2018

La renuncia al PAN de Joaquín Huacho Díaz Mena aparece como un tsunami para las elecciones locales y federales de julio próximo. Hace no mucho, en estas mismas líneas, advertimos la importancia de que los candidatos a la gubernatura de Yucatán supieran escoger a sus generales para acompañarlos en el proceso electoral por la alcaldía de Mérida y al Senado de la República, principalmente. También en estas líneas comentamos la importancia del tejido fino del jefe Rolando que en las filas del PRI logró mantener, -bien que mal-, la ansiada unidad de su partido. Y finalmente advertimos que en la casa de enfrente, es decir en el PAN, la cosa pintaba candela, pero que la soberbia de creerse ganadores antes de tiempo, no les dejaba ver lo que podría ocurrir.

Y es que hay que admitir que Huacho tiene un peso importante en el interior del estado, sobre todo en el Oriente, que abarca desde Río Lagartos hasta Peto, circunstancia que no supieron valorar en el PAN, cuyos militantes siguen pensando que Yucatán es Mérida. La historia de todo este proceso es interesante y pone en evidencia lo aquí señalado hace ya un par de meses.

En la última visita de AMLO a Yucatán en febrero pasado, alguien del primer círculo del tres veces candidato presidencial dejó entrever que ante el estancamiento de las negociaciones con el amigo Libo (quien logró acuerdos con el jefe Rolando y con ello mantener la unidad priísta), el nombre del diputado Díaz Mena se presentaba como otra opción viable… para el Senado. El líder de Morena, que tiene una larga experiencia en procesos electorales, -aunque los pierda-, midió la situación y lanzó a bocajarro la pregunta: “¿Y para la gubernatura qué números da? AMLO, sabedor que en Yucatán la tradición bipartidista lo mandaba a un tercer lugar, vio una ventana de oportunidad en la eventual candidatura de Huacho, que le atraería miles de votos y lo colocaría en una segunda, o incluso primera posición en el estado.

Casi en paralelo, el grupo logístico de otro candidato de Morena a una gubernatura en el centro del país, se dio a la tarea de realizar un ejercicio de mini encuesta exprés que arrojó resultados que sorprendieron a propios y extraños: Huacho es más que competitivo para la elección de gobernador. Es así que ante esta situación Morena comenzó a construir puentes con Huacho, quien frustrado veía cómo en su propia casa le cerraban la puerta… al Senado.

Se dice que el trato con soberbia a su ex diputado fue del candidato frentista Ricardo Anaya, pero la verdad es que ni PAN, ni PRD, ni sus líderes locales y nacionales, terminan de entender que Yucatán no es México, y que tampoco se limita a Mérida. Mientras Sahuí y el mismo Huacho saben lo que es recorrer todo el territorio del estado (uno lo hizo como secretario de Sedesol y el otro como candidato a gobernador hace exactamente seis años), Vila se enfrenta a un escenario que no conoce del todo, ni mucho menos como sus dos contrincantes. Y es que el ex alcalde podrá conocer muy bien Mérida, -y cierto es que ello representa la mitad del estado en términos electorales-, pero aun así simplemente no le alcanzará para hacerse de la silla del palacio de gobierno. Ahora las cosas cambian la circunstancia electoral del próximo 1 de julio. Como en el póker, con la candidatura de Huacho, las cartas se reparten una vez más, y una vez echadas parecen beneficiar al PRI, principalmente. Con todo, Vila tiene desde ahora la oportunidad de repensar las cosas y hacer una campaña audaz y propositiva.

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No obstante, -y de ahí lo interesante del proceso que se avecina-, el partido de la revolución institucionalizada tampoco puede dormirse en sus laureles, porque por primera vez en muchos años se va configurando un escenario y una elección de tercios, que cualquiera puede ganar.

Sin lugar a dudas la figura de Huacho atraería votos a AMLO y le restaría a Vila, pero sobre todo a Anaya, quien en su camino hacia la presidencia va dejando demasiados heridos y damnificados. Simultáneamente, Huacho puede beneficiarse de la figura de AMLO, quien históricamente aún derrotado ha dado victorias electorales a la gente que lo rodea.

Por lo pronto, la encuesta de Massive caller, publicada ayer, da a Vila 33.23 puntos, sobre Sahuí, que tiene 26.49 y de Huacho, con 13.39. Esperemos las encuestas que se publicarán dentro de dos semanas para observar la verdadera evolución de las preferencias electorales de los yucatecos; las campañas aún no comienzan y seguramente ya se cerraron a tres tercios. Vale la pena preguntarse ¿cómo hará el PAN para detener la sangría de preferencias electorales que se anuncia en los próximos días?

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