Coacción y turismo electoral

Por Cliserio E. Cedillo
Foto: Infoqroo
La Jornada Maya

Viernes 9 de marzo, 2018

Entre aspirantes a la presidencia municipal de Puerto Morelos, contrarios a la coalición PRI-Verde, se ha filtrado la información de que el Instituto Federal Electoral (INE) detectó más de dos mil turistas electorales, de los cuales más de 800 están perfectamente identificados, pues no se les encuentra en sus nuevas direcciones. La mayoría de estos provienen de las colonias irregulares del ejido Alfredo V. Bonfil, en Benito Juárez.

Ellos, según el Padrón Electoral, cambiaron su dirección en los últimos meses, al final del año anterior y principios del presente, de las colonias Tres Reyes, Chiapaneca, Valle Verde y otras, que se cuentan entre las más vulnerables del poniente de Cancún a zonas igualmente marginadas de Puerto Morelos.

Siendo optimistas, más no justificándolo, es una de las pocas oportunidades, cada tres años -o dos como en esta ocasión-, que tienen algunas familias vulnerables para cambiar de residencia temporalmente y recibir entre mil y mil 500 pesos de compensación, como si se tratara de viáticos, además de asegurar la entrega de su despensa mensual “que ya no se entrega públicamente, sino en domicilios particulares de líderes bien identificadas”.

Según una “turista”, para “obtener la compensación” tuvo que estar dispuesta a viajar a Puerto Morelos e identificarse con una residente de ese municipio, en este caso en la populosa colonia Cetina Gasca, quien certificó su residencia en ese municipio para poder hacer el cambio de domicilio, “aunque sólo sea para el día de la elección”.

Según explica, para asegurar que continúe la entrega de su despensa mensual, pues la mayoría de turistas electorales son beneficiarios de este polémico apoyo por su utilidad como coacción al voto verde, tienen que estar registradas en los padrones de entrega de despensas, “ahora por colonias”. Seguir las instrucciones para conocer su residencia temporal en Puerto Morelos, por lo general en casa de alguna de las seguidoras de las líderes beneficiadas “con un apoyo mensual”, por parte de la presidenta municipal Laura Fernández.

Posteriormente, explica nuestra fuente, la verdadera dueña de la casa la acompaña a las oficinas del INE donde atestigua la nueva vecindad de la “turista”, quien entrega los documentos correspondientes para tramitar su cambio de domicilio y obtener su nueva credencial para votar. Por esa acción recibe 500 pesos y la promesa de que el día de la elección, previa muestra en fotografía de teléfono celular, de que votó por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) recibirá otros mil pesos.

Ante lo descrito, se preguntará el lector ¿de qué sirven dos mil votos? La respuesta es de mucho si se tiene un padrón de sólo 14 mil 40 electores, de los cuales apenas vota el 40 por ciento. Un ejemplo es que Laura Fernández Piña, de la coalición PRI-PVEM, ganó la pasada elección con 3 mil 600 votos, misma cantidad que requiere para volver a ganar en caso de buscar la reelección como ya se menciona.

Ante ello, y por muy buenos contrincantes que tenga, no sólo garantizaría el triunfo, sino que a ese número se le sumarían otros mil 200 votos, pues funcionarios del INE afirman que han detectado a 800 de los dos mil turistas registrados; es decir, Laura Fernández llegaría fácilmente a más de cinco mil 500 sufragios con esta estrategia de turismo electoral.

Y hay más. En el Ayuntamiento de Puerto Morelos corre la voz de que Laura, no conforme con esa estrategia, aumentó su nómina a 900 empleados. Se pensará que existe una recaudación muy eficiente para tener esa cantidad de empleados en un municipio de reciente creación, además de que se tiene otra relación de trabajadores en Leona Vicario que no está registrada, pero que al igual que el resto tienen una consigna muy especial:

Que el día de la elección tienen que llevar a votar cada uno a cuatro personas más, so pena de ser castigados de alguna forma. Es decir, sumarían los tres mil 600 votos, con los que inicialmente ganó la alcadía Laura Fernández, más los mil 200 votos de los turistas electorales, estaría casi garantizando su triunfo con un promedio de cuatro mil 800 votos.

Además de lo anterior, es importante considerar que el proceso electoral en Puerto Morelos es complicado. Desde el punto de vista de que las credenciales, con algunas excepciones, no cuentan al municipio recién creado, sino que hace aparecer a los residentes, en el caso de Leona Vicario, como si pertenecieran al municipio de Benito Juárez.

En el caso del municipio número once, Puerto Morelos, el padrón con 14 mil 40 electores es irregular porque se “tomaron en cuenta el total de los electores de siete secciones, seis de las cuales se comparte tres con Benito Juárez y otras tres con Solidaridad”. Es decir, las secciones electorales 180 y 179 están divididas prácticamente a la mitad del territorio con Cancún, mientras que la 171, 180 y 179 se comparten con Solidaridad.

De igual forma, las secciones 295 y 177 de Benito Juárez se comparten con Puerto Morelos, y la 295 y 177 de Solidaridad se dividen también con este de reciente creación que luego de dos años no se ha corregido.

Sin embargo, para la mayoría de aspirantes el día de la elección bastará que para votar se cheque en las credenciales, aunque establezcan como municipios a Benito Juárez o Puerto Morelos, que corresponden a las secciones que por tradición han pertenecido los habitantes de Puerto Morelos, Leona Vicario y Central Vallarta, lo que seguramente se prestará a confusión. Claro, sin considerar las estrategias de coacción del voto y turismo electoral, arriba descritos.

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