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La Jornada Maya
Foto: Tomada de Facebook

Lunes 5 de febrero, 2018

El pasado 19 de enero, Daniel Martín León Cruz presentó su renuncia a la rectoría general del Instituto Tecnológico Superior de Champotón (ITESCHAM), para registrarse al otro día en la sede municipal del PRI de esa localidad. En consecuencia su lugar lo ocupó, de manera interina, Ivonne Medelij Cobos Sleme.

Tres días después se llevó a cabo el registro de los entonces aspirantes a precandidatos por el distrito 14 y 15; Ambrosio López y Zaydé Yabur, respectivamente, durante un acto que tuvo lugar en la sede del Comité Directivo Estatal (CDE) del PRI de esta capital, a las 12 horas.

Y fue precisamente ese día cuando los empleados de esa institución educativa, Carlos David Rebolledo Salazar, jefe del Departamento de Vinculación; Carlos Antonio Cámara Góngora, jefe del Departamento de Planeación; Martín Damián Martínez Cardeñas, jefe del Departamento de Recursos Humanos; la docente Josefina Rodríguez Guerrero, Dashiell Ulises Santana, Roberto Sarricolea González, Carlos Onofre Maas, Ramón Rivera Medina y Juan Carlos Osorno, entre otros, llegaron junto con los ungidos para hacerles comparsa, aparentemente con el consentimiento de la directora interina, pues todos ellos a esa hora debieron estar cumpliendo su horario de labores.

Para no variar, todavía rayando el colmo del cinismo, tuvieron la desfachatez de subir a redes sociales la evidencia más contundente de su presencia en este acto político, cual fiesta a la usanza priísta, cuando su responsabilidad y obligación laboral estaba en la institución educativa a la que le sirven.

Hasta el día de hoy no se les ha impuesto ningún tipo de castigo o sanción administrativa, de lo que deduce que la directora interina estuvo coludida o tuvo indicaciones superiores para permitirles ausentarse de sus labores, para dar rienda suelta al proselitismo político.

Éste no es el primer caso que se presenta en el Instituto Tecnológico de Champotón, pues ya el director del plantel, hoy aspirante a la alcaldía de Champotón, solía recurrentemente incurrir en prácticas que rayan todo acto de legalidad, como contratar a maestros que no pegan un solo golpe, tal es el caso de la maestra Josefina Rodríguez Guerrero.

De las evidencias gráficas del proselitismo político, La Jornada Maya obtuvo algunas pruebas que se agregan, donde en círculo se señala a las personas que acudieron a esos eventos políticos en pleno horario de la labores.

Más irregularidades en el ITESCHAM

De empleados del plantel recibimos este documento para solicitar la intervención del gobernador Alejandro Moreno Cárdenas, para que se ponga fin a las irregularidades que persisten:

El personal que ha ingresado a laborar en la institución en su mayoría tiene otro empleo, por consecuencia no pueden atender sus horarios en el ITESCHAM. Son literalmente aviadores, pues asisten cuando quieren, y porque gozan de protección del ex director Daniel León Cruz, hoy flamante precandidato a la alcaldía de Champotón.

Es triste ver cómo el ITESCHAM es usado únicamente como trampolín político, tal y como lo demuestra el caso más evidente de Daniel León Cruz, quien ahora contenderá por la alcaldía de Champotón y seguramente de la institución saldrán los recursos económicos para su campaña al dejar al frente a una de sus incondicionales.

El prefecto del plantel se toma atribuciones que no le corresponden, sólo porque pertenece al grupo de privilegiados. Es prepotente, grosero, con su pose pretende intimidar a los docentes y administrativos que sÍ trabajan y cumplen con su horario, además que muchas veces en pleno horario de clases ha dedicado el tiempo a trabajar un taxi de su propiedad.

Se ha impuesto una cuota de mil pesos a los aspirantes que pretenden ingresar como docentes al ITESCHAM, pero no cualquiera queda, tal y como ocurrió con Aida Avila, Shirley Morales; sin embargo, Carla Briceño y Antonio Ralpozos fueron los designados aunque tienen funciones de tiempo completo en la institución de nivel preparatoria, ¿cómo le harán para organizarse?

El portal de transparencia del ITESCHAM se encuentra desactualizado: nadie sabe cuánto y qué se hace con los recursos que ingresan al plantel y para colmo de males, por instrucciones de la Dirección General, iniciaron recortes de personal que no es afín a los intereses del grupo en el poder, y desaparecieron compensaciones, bonos, entre otras prestaciones que por ley les corresponden a los docentes.

En tanto que a la gran mayoría de los maestros se les paga un salario ínfimo, quienes gozan de la predilección de la dirección reciben arriba de los 5 mil pesos quincenales.

Como recurrentemente suele suceder, el administrador de la institución jinetea el dinero que ingresa por diferentes conceptos, lo que le ha traído muy buenos dividendos económicos al crear empresas con prestanombres, de familiares y amigos.

Nadie sabe por qué desde 2014 permanece parada una obra del plantel, pese a que ya se habían comprometido los recursos. La pregunta obligada es ¿dónde quedó el dinero?

El jefe de división tiene otros trabajos, por lo que únicamente se le ve en el ITESCHAM todas las mañanas, a la hora de checar tarjeta, y de ahí en adelante nadie sabe de su paradero.

Ante tales atropellos, los quejosos que por causas obvias no dan a conocer sus nombres por temor a represalias, solicitan urgentemente la intervención del gobernador Alejandro Moreno Cárdenas para que se tomen cartas en el asunto y sobre todo para que se aplique la ley sin ningún distingo.

Los juegos de la política

Causa mucha extrañeza y sorpresa que ninguno de los 19 diputados del PRI de la actual Legislatura, así como los dos del Partido Verde Ecologista (PVEM) y los dos del Partido Nueva Alianza (Panal) hayan sido designados para contender por algún cargo de elección popular.

Según en los mentideros de café, el único palomeado es el actual presidente de la Junta de Gobierno y Administración, Ramón Martín Méndez Lanz, quien sigue preparando el baúl para trasladar temporalmente su residencia a la Ciudad de México.

[b]Esta columna está redactada por los reporteros, colaboradores, espías y gargantas profundas, amigos de La Jornada Maya.[/b]

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