Reindustrialización en Yucatán: duplicar el bienestar

Liborio Vidal
Foto: Fernando Eloy
La Jornada Maya

Lunes 8 de mayo, 2017

Como legislador federal, empresario, padre de familia y yucateco, me preocupa y me ocupa que a Yucatán le vaya bien. Trato de contribuir, en todo lo que puedo, para que nuestro estado siga siendo el más seguro del país, para que se sigan creando empleos formales, para que los servidores públicos se conduzcan con honestidad y haya buenos servicios e infraestructura.

Son muchos los datos que indican que Yucatán va bien, que va mucho mejor que el promedio del país, que las ideas y proyectos de reindustrialización impulsados por Rolando Zapata están funcionando. Sin embargo, hay un dato que me interesa especialmente me refiero al ritmo al que está creciendo la economía estatal y cómo eso traerá bienestar concreto a los que aquí vivimos.

La economía yucateca, en general, crece al 3.9 por ciento anual, un porcentaje que es mucho mayor que el promedio nacional, casi el doble; pero lo más interesante es que -según los datos públicos más recientes- nuestro sector industrial crece al 9.2 por ciento anual y la industria manufacturera al 11.5 por ciento. Y esto ¿qué quiere decir en términos simples?

Como empresario que soy, que ha logrado que su empresa de electrodomésticos pase de ser una pequeña, local, a una con presencia en siete estados del país, dueña de marcas tecnológicas propias, una pregunta que siempre me hago es ¿al ritmo que vamos en cuánto tiempo duplicaremos nuestro tamaño?

Bueno, si aplicamos la misma pregunta para Yucatán y si mantenemos el modelo de desarrollo que ha sembrado Rolando Zapata, en tan sólo ocho años la industria estatal produciría el doble de lo que hoy, y la manufactura en tan sólo 6 años, duplicaría su tamaño actual.

Esto es importante, porque quiere decir que las oportunidades de empleo y acceso a ingresos para miles de familias podrían crecer de forma significativa; y hay algo más: Mientras nuestra industria podría duplicar su tamaño hacia el 2025, nuestra población crecerá poco, muy poco en comparación.

Hoy somos 2 millones 172 mil yucatecos; en el 2025 seremos 2 millones 380 mil, es decir en los próximos 8 años la población del estado habrá crecido menos del 10 por ciento, pero la economía industrial -como ya mencioné- se puede duplicar.

Eso es precisamente lo que hay que discutir y cuidar hoy en Yucatán. Tenemos una oportunidad única de una economía en marcha y con rumbo, aun cuando el país tiene enormes retos. Hay que preservar lo que ya hemos sembrado en los últimos cuatro años y medio: la reindustrialización del estado debe continuarse y blindarse.

Habrá que cuidar, también, que la riqueza que se genere en los próximos años sea mejor redistribuida, y por eso será importante preservar y expandir -más allá de los ciclos políticos y electorales- los programas que siembran futuro, como lo son las becas a los jóvenes y la tecnificación del campo, sólo por dar dos ejemplos.

Yucatán tiene una oportunidad real de bienestar que no hay que perder. Tenemos una economía que puede duplicarse en una década apróximadamente, y una población que se estabiliza. Esa es una fórmula obvia para generar bienestar, por eso vale la pena mantener el camino. Lo digo como legislador, empresario, padre de familia y yucateco.

[i]Mérida, Yucatán[/i]