Chechén

La Jornada Maya
Foto: Rodrigo Díaz Guzmán

Lunes 13 de febrero, 2017

[b]Quintana Roo[/b]

No solo el Partido Revolucionario Institucional (PRI), está en crisis en Quintana Roo, también lo está Acción Nacional, el de la Revolución Democrática (PRD) e incluso Morena y eso significa un serio problema para el sistema partidista en el contexto que se avecina.

Están en puerta las elecciones de 2018, para elegir diputados federales, senadores y Presidente de la República y parece no haber una clara tendencia de hacia dónde se dirige la preferencia electoral de los ciudadanos que hasta el 2012 habían apoyado a Andrés Manuel López Obrador y a los candidatos oficialistas -del PRI gobierno-, en las demás elecciones.

El gobernador Carlos Joaquín, electo bajo la coalición PAN- PRD, sacó los resultados para estos partidos que por sí solos no habrán ganado una sola posición, pero hasta ahora parecen no despegar. De hecho parece que tampoco se tiene el control político de estos institutos que, aun siendo gobierno, permanecen en la inercia del bajo perfil que acostumbraba, cuando eran oposición.

Tanto el PAN como el PRD mantienen sus disputas internas; en ambos casos la elección de sus actuales dirigencias fueron accidentadas, lo que no brinda certeza a los pocos militantes y mucho menos abona a que los ciudadanos apartidistas sean llamados a participar.

La lección del proceso electoral local de 2016, fue precisamente que los ciudadanos estaban hartos de la clase política predominante y que cualquier cambio habría sido bueno. Pero ningún partido lo ha entendido, ni siquiera Morena que se pinta sólo para ser el refugio de ex priístas indignados.

[b]Campeche[/b]

[b]Profeco, de la vista gorda[/b]

Hay hierbas que requieren ser cortadas desde la raíz, otras que hay que cultivar. El turismo pertenece a esta segunda categoría, que en los últimos años ha recibido una atención especial por parte de los involucrados, principalmente del ejecutivo Estatal. Sin embargo, es hasta la presente administración cuando se volvió realmente prioridad.

Lo que hay que cortar de raíz, erradicar antes de que como maleza se extienda, es lo que sucede en una de los centros de mayor convivencia de la ciudad: la calle 59.
En los establecimientos cercanos a la Puerta del mar se empieza a generalizar un cobro que denominan “propina propuesta”, cantidad que los mismos propietarios o dependientes determinan; de tal modo que puede pasar que por un tarro de cerveza de 55 pesos, pongan 15 pesos como propina; es decir un 27 por ciento. Sin duda se trata de un abuso, porque la propina es el reconocimiento de la calidad del servicio, o se da cuando se quiere, pues es voluntaria.

Lo interesante es que lo practican sin temor a que personal de Profeco los descubra, los sancione y en dado caso ponga los sellos de clausura como recientemente acaba de suceder con la Chopería, por expedir recibos apócrifos.

La Profeco debe intervenir, porque de hacerse de la vista gorda el fenómeno puede extenderse y el efecto negativo, la reacción de los comensales, de los turistas podría ser el boicot o bajas ventas que a nadie le conviene.

*[b]Chechen[/b]. Es una planta altamente venenosa propia de la Península de Yucatán. Genera un rocío que se mezcla con el polvo que se va asentando sobre el árbol y al rozarla o pasar bajo la planta, se adhiere a la piel y la quema, causa fuerte comezón, ampollas dolorosas, hinchazón del cuerpo y hasta calentura. El remedio inmediato para contrarrestar su insoportable ardor es hervir hojas del árbol llamado chacá y mojar la piel dañada con el agua; otros aseguran que volviendo a pasar bajo la sombra del árbol el efecto del veneno se neutraliza.

[b]Esta columna está redactada por los reporteros, colaboradores, espías y gargantas profundas, amigos de La Jornada Maya.[/b]

[i]Quintana Roo, México[/i]

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